ALMERÍA HOY / 15·10·2018
Agentes de la Policía Local de Almería han detenido en las últimas horas a dos individuos, de 52 y 18 años, respectivamente, acusados de sendos delitos de malos tratos en el ámbito familiar al agredir presuntamente a su mujer, de la que se encuentra en trámites de separación, y a su propia madre paralítica.
La detención más reciente se produjo en la medianoche del pasado domingo en la Rambla Alfareros, donde se personó una patrulla policial tras ser requerida por una mujer debido a la actitud agresiva de quien resultó ser Francisco M.S., de 52 años y vecino de Almería. La víctima explicó a los agentes que había discutido con su marido en el domicilio y que tras recibir gritos e insultos la agredió en presencia de sus hijos menores. Interrogado al respecto el presunto autor de la agresión, éste reconoció que habían discutido, pero negó que la agrediese, sino que había sido ella la que le había golpeado a él, ya que están en trámites de separación.
La mujer manifestó no querer interponer denuncia, aunque los agentes le aconsejaron que sí lo hiciera y acudiera a Comisaría, adonde fue trasladado el presunto agresor para que instruir el correspondiente atestado.
Dos días antes, a mediodía del viernes, la Policía Local detuvo a Jesús M.F., de 18 años y vecino de la capital, acusado de agredir a su propia madre. La detención se produjo sobre las 12.15 en la Carrera del Mamí, después de que la requirente llamara a la Policía desde el comercio en el que se refugió huyendo de su hijo, que la había agredido varias veces con anterioridad.
Personada una patrulla en el lugar, observa que la víctima iba en silla de ruedas debido a una discapacidad física que le impide andar, quien les informa que momentos antes le había pedido a su hijo que se fuera del domicilio familiar debido a su comportamiento agresivo, a lo que éste respondido propinándole varias patadas en el estómago y en otras partes del cuerpo, lo que la obligó a refugiarse en un comercio cercano. La mujer aseguró que no era la primera vez que la agredía, al igual que a su propio padre, aunque nunca lo había denunciado, pero esta vez sí quería hacerlo.
Localizado el joven e interpelado sobre el asunto, éste reconoció que había discutido con su madre tras echarlo de casa, pero negó haberla agredido. El supuesto agresor fue detenido y conducido a Comisaría.
La detención más reciente se produjo en la medianoche del pasado domingo en la Rambla Alfareros, donde se personó una patrulla policial tras ser requerida por una mujer debido a la actitud agresiva de quien resultó ser Francisco M.S., de 52 años y vecino de Almería. La víctima explicó a los agentes que había discutido con su marido en el domicilio y que tras recibir gritos e insultos la agredió en presencia de sus hijos menores. Interrogado al respecto el presunto autor de la agresión, éste reconoció que habían discutido, pero negó que la agrediese, sino que había sido ella la que le había golpeado a él, ya que están en trámites de separación.
La mujer manifestó no querer interponer denuncia, aunque los agentes le aconsejaron que sí lo hiciera y acudiera a Comisaría, adonde fue trasladado el presunto agresor para que instruir el correspondiente atestado.
Dos días antes, a mediodía del viernes, la Policía Local detuvo a Jesús M.F., de 18 años y vecino de la capital, acusado de agredir a su propia madre. La detención se produjo sobre las 12.15 en la Carrera del Mamí, después de que la requirente llamara a la Policía desde el comercio en el que se refugió huyendo de su hijo, que la había agredido varias veces con anterioridad.
Personada una patrulla en el lugar, observa que la víctima iba en silla de ruedas debido a una discapacidad física que le impide andar, quien les informa que momentos antes le había pedido a su hijo que se fuera del domicilio familiar debido a su comportamiento agresivo, a lo que éste respondido propinándole varias patadas en el estómago y en otras partes del cuerpo, lo que la obligó a refugiarse en un comercio cercano. La mujer aseguró que no era la primera vez que la agredía, al igual que a su propio padre, aunque nunca lo había denunciado, pero esta vez sí quería hacerlo.
Localizado el joven e interpelado sobre el asunto, éste reconoció que había discutido con su madre tras echarlo de casa, pero negó haberla agredido. El supuesto agresor fue detenido y conducido a Comisaría.
