Agentes de la Policía Local se desplazaron el pasado lunes hasta una vivienda de la calle Pedro Jover y un bar en la calle San Juan
Imagen de archivo. |
ALMERÍA HOY / 19·04·2017
Agentes de la Policía Local de Almería detuvieron a mediodía del lunes a un hombre de 72 años, identificado como J. M., como presunto autor de un delito de malos tratos en el ámbito familiar al agredir y amenazar de muerte a su mujer, de 70, en una vivienda de la calle Pedro Jover.
Los hechos ocurrieron poco antes de las 12.00 horas, cuando se recibió una llamada de una mujer en la Sala 092 alertando de que su hija había sido agredida por su marido, según le dijo ella misma por teléfono, por lo que de inmediato una patrulla se dirigió al lugar de los hechos.
Una vez en la vivienda, los agentes identificaron a Trinidad R., de 70 años y nacionalidad española que, en un principio, niega los hechos, pero al llegar su madre, de 89 años, a la vivienda, recapacitó y reconoció haber sido golpeada en cara y cuerpo, y amenazada por su marido con que «la iba a tirar por la ventana de la vivienda, y que si llamaba a la Policía la mataba».
Ante las manifestaciones de algunos vecinos afirmando que estos hechos son muy habituales y comprobar la existencia de signos evidentes de lo mencionado, corroborados por una hija de 50 años y testigo de los hechos, los funcionarios policiales procedieron a la detención del sujeto, que se encontraba en una habitación de la vivienda, y a su traslado a Comisaría como presunto autor de un delito de malos tratos en el ámbito familiar.
Minutos después, la Policía Local recibía la llamada de otra mujer, identificada como Concepción C. de 40 años, natural de Asturias y domiciliada en la capital, denunciando que se había tenido que refugiar en el bar ‘San Juan’, sito en la calle del mismo nombre, porque momentos antes había recibido una bofetada a manos de su pareja, seguida de amenazas con un cuchillo, por lo que había salido corriendo del domicilio familiar para evitar más agresiones.
Una dotación policial se desplazó hasta la vivienda de la víctima, en la calle Clarín, donde identificaron al denunciado como V. M., de 45 años, quien reconoció haber discutido con su pareja, pero niega agresión alguna. Sin embargo, ante las evidencias apreciadas, los agentes proceden a su detención como presunto autor de un delito de violencia de género.
Los hechos ocurrieron poco antes de las 12.00 horas, cuando se recibió una llamada de una mujer en la Sala 092 alertando de que su hija había sido agredida por su marido, según le dijo ella misma por teléfono, por lo que de inmediato una patrulla se dirigió al lugar de los hechos.
Una vez en la vivienda, los agentes identificaron a Trinidad R., de 70 años y nacionalidad española que, en un principio, niega los hechos, pero al llegar su madre, de 89 años, a la vivienda, recapacitó y reconoció haber sido golpeada en cara y cuerpo, y amenazada por su marido con que «la iba a tirar por la ventana de la vivienda, y que si llamaba a la Policía la mataba».
Ante las manifestaciones de algunos vecinos afirmando que estos hechos son muy habituales y comprobar la existencia de signos evidentes de lo mencionado, corroborados por una hija de 50 años y testigo de los hechos, los funcionarios policiales procedieron a la detención del sujeto, que se encontraba en una habitación de la vivienda, y a su traslado a Comisaría como presunto autor de un delito de malos tratos en el ámbito familiar.
Minutos después, la Policía Local recibía la llamada de otra mujer, identificada como Concepción C. de 40 años, natural de Asturias y domiciliada en la capital, denunciando que se había tenido que refugiar en el bar ‘San Juan’, sito en la calle del mismo nombre, porque momentos antes había recibido una bofetada a manos de su pareja, seguida de amenazas con un cuchillo, por lo que había salido corriendo del domicilio familiar para evitar más agresiones.
Una dotación policial se desplazó hasta la vivienda de la víctima, en la calle Clarín, donde identificaron al denunciado como V. M., de 45 años, quien reconoció haber discutido con su pareja, pero niega agresión alguna. Sin embargo, ante las evidencias apreciadas, los agentes proceden a su detención como presunto autor de un delito de violencia de género.