La organización agraria acusa a los poderes públicos de maquillar los problemas de los agricultores, en lugar de establecer mecanismos de defensa frente a terceros países
UPA asegura que los precios de los productos agrícolas están por debajo de los costes de producción. |
EUROPA PRESS / 27·04·2016
La Unión de Pequeños Agricultores (UPA) ha repartido este miércoles un total de 5.000 kilos de berenjenas y tomates en la rambla Federico García Lorca de Almería en protesta por los «alarmantes» resultados de la campaña agrícola, con «precios en pérdidas» en el caso del tomate y caídas generalizadas, salvo en el pimiento en distintas variedades.
UPA ha lamentado que «una campaña más» los agricultores almerienses sufran «pérdidas», debido a que los productos han estado «por debajo de los costes de producción», al tiempo que ha resaltado que la situación del tomate es «especialmente dura», con precios «en pérdidas, arrastrados de la anterior campaña, cuando ya estaban un 80 por ciento por debajo de su costes».
Asimismo, la organización agraria ha destacado que productos como la berenjena y el calabacín, «que tienen el agravante de que aún no están incluidos en productos de retirada por el veto ruso», se han visto envueltos en una situación «mucho más difícil todavía».
«Nuestra enorme preocupación por los datos económicos de esta campaña viene motivada, fundamentalmente, por la aceptación generalizada en la Administración de que no sufrimos una situación excepcional, sino que debemos asumir que los precios de esta campaña van a ser una realidad de futuro, sin posible mejora ni solución», ha matizado UPA.
Y es que para la organización, los poderes públicos «se han demostrado impotentes para resolver nuestros problemas, maquillando con mínimas mejoras nuestras condiciones en lugar de dotar a la agricultura de verdaderos mecanismos de equilibrio en la cadena alimentaria y en la defensa de la producción propia frente a terceros países».
Desde UPA Andalucía se ha propuesto que los cupos del veto ruso, que no son utilizados en otros productos, sean trasladados a aquellos con mayor demanda de retirada, de manera que se incluyan la berenjena y el calabacín y se aumenten los precios en todos los productos. Además, ha reclamado la creación de dos tipos de fondos en las organizaciones de productores de frutas y hortalizas (OPFH), uno para la gestión de las organizaciones y otro para la gestión de crisis, así como que se defina «claramente quién puede y cómo constituir una OPFH».
En cuanto a los acuerdos con terceros países, la organización agraria ha exigido «hacer valer la cláusula de salvaguarda para importaciones, garantizar la sanidad vegetal en el caso de las exportaciones y mantener las aduanas abiertas las 24 horas del día».
UPA ha lamentado que «una campaña más» los agricultores almerienses sufran «pérdidas», debido a que los productos han estado «por debajo de los costes de producción», al tiempo que ha resaltado que la situación del tomate es «especialmente dura», con precios «en pérdidas, arrastrados de la anterior campaña, cuando ya estaban un 80 por ciento por debajo de su costes».
Asimismo, la organización agraria ha destacado que productos como la berenjena y el calabacín, «que tienen el agravante de que aún no están incluidos en productos de retirada por el veto ruso», se han visto envueltos en una situación «mucho más difícil todavía».
«Nuestra enorme preocupación por los datos económicos de esta campaña viene motivada, fundamentalmente, por la aceptación generalizada en la Administración de que no sufrimos una situación excepcional, sino que debemos asumir que los precios de esta campaña van a ser una realidad de futuro, sin posible mejora ni solución», ha matizado UPA.
Y es que para la organización, los poderes públicos «se han demostrado impotentes para resolver nuestros problemas, maquillando con mínimas mejoras nuestras condiciones en lugar de dotar a la agricultura de verdaderos mecanismos de equilibrio en la cadena alimentaria y en la defensa de la producción propia frente a terceros países».
Desde UPA Andalucía se ha propuesto que los cupos del veto ruso, que no son utilizados en otros productos, sean trasladados a aquellos con mayor demanda de retirada, de manera que se incluyan la berenjena y el calabacín y se aumenten los precios en todos los productos. Además, ha reclamado la creación de dos tipos de fondos en las organizaciones de productores de frutas y hortalizas (OPFH), uno para la gestión de las organizaciones y otro para la gestión de crisis, así como que se defina «claramente quién puede y cómo constituir una OPFH».
En cuanto a los acuerdos con terceros países, la organización agraria ha exigido «hacer valer la cláusula de salvaguarda para importaciones, garantizar la sanidad vegetal en el caso de las exportaciones y mantener las aduanas abiertas las 24 horas del día».