La víctima fue captada con 15 años en Nigeria con la promesa de un trabajo Europa, y obligada a prostituirse durante dos años en Libia
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| Imagen de archivo. | CNP. |
EUROPA PRESS / 25·02·2016
Agentes de la Policía Nacional han rescatado en Murcia a una mujer de 19 años y nacionalidad nigeriana que acababa de llegar a España para ser explotada sexualmente en Almería.
La joven pidió auxilio desde los aseos de la estación de autobuses de San Andrés (Murcia), donde fue encontrada por los agentes, quienes detuvieron poco después a la presunta proxeneta cuando trataba de confundirse entre el resto de viajeros, según han informado fuentes policiales.
La víctima fue captada con 15 años en Nigeria con la promesa de un trabajo ordinario en nuestro país, y obligada a prostituirse durante dos años en Libia, en el transcurso de su viaje hasta Europa. En el registro de la vivienda de la detenida se han encontrado diversos indicios de la práctica de rituales de vudú.
Según explican las mismas fuentes, un aviso recibido en la Jefatura de Policía Nacional de Murcia alertaba de que una mujer de habla inglesa solicitaba auxilio desde los aseos de la estación de autobuses.
La joven, que fue localizada por una patrulla que se hallaba en las inmediaciones, se dirigió muy nerviosa a los policías mientras que otra compatriota que la acompañaba, que resultó ser la proxeneta, trató de confundirse entre el resto de viajeros que se encontraban en la estación, siendo finalmente interceptada. Al parecer pretendía llevar a la chica hasta Almería, donde iba a ser finalmente explotada.
Obligada a prostituirse durante su viaje a Europa
Una vez en dependencias policiales, la víctima fue entrevistada por agentes especializados de la Unidad contra las Redes de Inmigración Ilegal y Falsedades Documentales (UCRIF), así como por personal de la Comunidad Autónoma acreditado en la asistencia a mujeres víctimas de trata.
La Policía Nacional averiguó que la víctima llevaba pocos días en España, donde llegó con documentación falsa desde Italia.
Con 15 años, viviendo en Nigeria, fue captada por la ahora detenida con la promesa de un trabajo en Europa en un supermercado. Así, viajó ilegalmente hasta Libia, donde le informaron que tenía que pagar una deuda de 40.000 euros a la organización.
Al no poder hacer frente a esta deuda, la proxeneta la 'vendió' en Libia a otros explotadores, quienes la obligaron a prostituirse durante al menos dos años, cuando era aún menor de edad, siendo sometida con continuas violaciones y amenazas de muerte, hasta que la proxeneta reunió el dinero necesario para trasladarla a España.
Rituales de Vudú
Tras el arresto de la proxeneta, los investigadores realizaron diversas gestiones para tratar de localizar a otras víctimas o responsables de la explotación sexual de la joven.
En el registro llevado a cabo en el domicilio de la detenida, en la localidad de alicantina de Torrevieja, se intervinieron tres pasaportes y numerosos móviles. También se hallaron indicios de rituales de vudú —restos de cabellos, vello púbico y sangre de las víctimas— envueltos junto con el nombre de las mujeres objeto del ritual, que habría sido empleado para doblegar su voluntad.
La operación ha sido llevada a cabo por agentes del Grupo de Trata de Seres Humanos de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras y el Grupo de Seguridad Ciudadana de la Comisaría de Distrito de San Andrés (Murcia).
La Policía Nacional mantiene la línea telefónica 900 10 50 90 y el correo trata@policia.es para facilitar la colaboración ciudadana y la denuncia, anónima y confidencial, de este tipo de delitos.
La joven pidió auxilio desde los aseos de la estación de autobuses de San Andrés (Murcia), donde fue encontrada por los agentes, quienes detuvieron poco después a la presunta proxeneta cuando trataba de confundirse entre el resto de viajeros, según han informado fuentes policiales.
La víctima fue captada con 15 años en Nigeria con la promesa de un trabajo ordinario en nuestro país, y obligada a prostituirse durante dos años en Libia, en el transcurso de su viaje hasta Europa. En el registro de la vivienda de la detenida se han encontrado diversos indicios de la práctica de rituales de vudú.
Según explican las mismas fuentes, un aviso recibido en la Jefatura de Policía Nacional de Murcia alertaba de que una mujer de habla inglesa solicitaba auxilio desde los aseos de la estación de autobuses.
La joven, que fue localizada por una patrulla que se hallaba en las inmediaciones, se dirigió muy nerviosa a los policías mientras que otra compatriota que la acompañaba, que resultó ser la proxeneta, trató de confundirse entre el resto de viajeros que se encontraban en la estación, siendo finalmente interceptada. Al parecer pretendía llevar a la chica hasta Almería, donde iba a ser finalmente explotada.
Obligada a prostituirse durante su viaje a Europa
Una vez en dependencias policiales, la víctima fue entrevistada por agentes especializados de la Unidad contra las Redes de Inmigración Ilegal y Falsedades Documentales (UCRIF), así como por personal de la Comunidad Autónoma acreditado en la asistencia a mujeres víctimas de trata.
La Policía Nacional averiguó que la víctima llevaba pocos días en España, donde llegó con documentación falsa desde Italia.
Con 15 años, viviendo en Nigeria, fue captada por la ahora detenida con la promesa de un trabajo en Europa en un supermercado. Así, viajó ilegalmente hasta Libia, donde le informaron que tenía que pagar una deuda de 40.000 euros a la organización.
Al no poder hacer frente a esta deuda, la proxeneta la 'vendió' en Libia a otros explotadores, quienes la obligaron a prostituirse durante al menos dos años, cuando era aún menor de edad, siendo sometida con continuas violaciones y amenazas de muerte, hasta que la proxeneta reunió el dinero necesario para trasladarla a España.
Rituales de Vudú
Tras el arresto de la proxeneta, los investigadores realizaron diversas gestiones para tratar de localizar a otras víctimas o responsables de la explotación sexual de la joven.
En el registro llevado a cabo en el domicilio de la detenida, en la localidad de alicantina de Torrevieja, se intervinieron tres pasaportes y numerosos móviles. También se hallaron indicios de rituales de vudú —restos de cabellos, vello púbico y sangre de las víctimas— envueltos junto con el nombre de las mujeres objeto del ritual, que habría sido empleado para doblegar su voluntad.
La operación ha sido llevada a cabo por agentes del Grupo de Trata de Seres Humanos de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras y el Grupo de Seguridad Ciudadana de la Comisaría de Distrito de San Andrés (Murcia).
La Policía Nacional mantiene la línea telefónica 900 10 50 90 y el correo trata@policia.es para facilitar la colaboración ciudadana y la denuncia, anónima y confidencial, de este tipo de delitos.
