Los dos agentes fueron trasladados hasta un centro de salud por presentar problemas leves de respiración y mareos debidos a la gran cantidad de humo inhalado
ALMERÍA HOY / 23·09·2015
Agentes de la Guardia Civil del Puesto de Tabernas han impedido que dos personas, una de ellas un menor de seis años, fallezcan en el interior de su vehículo en llamas. Los hechos ocurrieron en la noche del pasado día 21, cuando los agentes, en cometidos de seguridad ciudadana por la carretera N-340a, a la altura del P.K 463, observaron un vehículo estacionado en parte de la calzada y desprendiendo llamas por la parte baja del motor, así como abundante humo.
Rápidamente, los agentes hicieron uso del extintor de incendios del vehículo oficial, no logrando sofocar las llamas en su totalidad, pero sí les permitió acercase al vehículo para comprobar cómo el habitáculo estaba lleno de humo y en el interior del mismo había dos personas, un hombre en el asiento del conductor, y un niño en el asiento trasero, ambos inconscientes.
Los agentes intentaron reanimarlos, pero no respondían a los estímulos, por lo que uno de ellos cogió al niño en sus brazos y lo alejó del vehículo para comenzar con las primeras maniobras de reanimación, momento en el que el menor comenzó a reaccionar, vomitando y tosiendo.
Instantes después, entre los dos agentes de la Guardia Civil y un usuario de la vía al que se le solicitó ayuda, dada la gran corpulencia del hombre, lograron sacar al conductor del vehículo, evitando así el peligro de las llamas o posibles explosiones, iniciando también las maniobras de reanimación sobre la víctima.
Tras varios intentos de reanimación, el hombre empezó a recuperar el conocimiento y a hablar, manifestando versiones incongruentes de lo ocurrido a los agentes, no logrando acordarse de nada.
Poco después, los servicios médicos de la localidad de Tabernas se personaron en el lugar, trasladando a las dos personas hasta el Hospital de Torrecárdenas en la capital almeriense, y posteriormente llegaron al lugar los Bomberos para terminar de extinguir el fuego del vehículo.
Una vez finalizada su actuación, los dos agentes de la Guardia Civil son trasladados hasta el centro de Salud de Tabernas por presentar problemas leves de respiración y mareos, consecuencia de la gran cantidad de humo inhalado.
Rápidamente, los agentes hicieron uso del extintor de incendios del vehículo oficial, no logrando sofocar las llamas en su totalidad, pero sí les permitió acercase al vehículo para comprobar cómo el habitáculo estaba lleno de humo y en el interior del mismo había dos personas, un hombre en el asiento del conductor, y un niño en el asiento trasero, ambos inconscientes.
Los agentes intentaron reanimarlos, pero no respondían a los estímulos, por lo que uno de ellos cogió al niño en sus brazos y lo alejó del vehículo para comenzar con las primeras maniobras de reanimación, momento en el que el menor comenzó a reaccionar, vomitando y tosiendo.
Instantes después, entre los dos agentes de la Guardia Civil y un usuario de la vía al que se le solicitó ayuda, dada la gran corpulencia del hombre, lograron sacar al conductor del vehículo, evitando así el peligro de las llamas o posibles explosiones, iniciando también las maniobras de reanimación sobre la víctima.
Tras varios intentos de reanimación, el hombre empezó a recuperar el conocimiento y a hablar, manifestando versiones incongruentes de lo ocurrido a los agentes, no logrando acordarse de nada.
Poco después, los servicios médicos de la localidad de Tabernas se personaron en el lugar, trasladando a las dos personas hasta el Hospital de Torrecárdenas en la capital almeriense, y posteriormente llegaron al lugar los Bomberos para terminar de extinguir el fuego del vehículo.
Una vez finalizada su actuación, los dos agentes de la Guardia Civil son trasladados hasta el centro de Salud de Tabernas por presentar problemas leves de respiración y mareos, consecuencia de la gran cantidad de humo inhalado.