El barco navegaba con bandera de la República Democrática del Congo y sus tripulantes, de origen sirio, no opusieron resistencia al ser abordados
EUROPA PRESS / 13·05·2015
Agentes del Servicio de Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria han detenido en Almería a seis miembros de un pesquero que transportaba, según los primeros indicios, unas cinco toneladas de hachís. La droga se encontraba distribuida en unos 200 fardos, y ha sido intervenida cuando el barco navegaba a unas 60 millas de Cabo de Gata.
La operación ha sido coordinada por el Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional y la Fiscalía Antidroga, y se inició sobre las 2:15 horas, después de que un helicóptero de Vigilancia Aduanera observara una embarcación semirrígida junto al mercante 'San Trela' ejecutando el trasbordo, presuntamente, de una serie de fardos de hachís.
Ante esta situación, se produjo un seguimiento del mercante, con bandera de la República Democrática del Congo, hasta que a las 07:00 horas se produjo el abordaje del mismo mediante las patrulleras del servicio de aduanas de la Agencia Tributaria 'Décimo aniversario', de Málaga, y 'ALCA', de Almería.
De esta manera, los agentes han detenido a la tripulación, de origen sirio, entre los que había cinco marineros y un capitán, quien fue conducido hasta el Puerto de Almería en la mañana de este miércoles para ejecutar la inspección del navío, a cargo del Juzgado de Instrucción número 1 de Almería.
Tras estas detenciones, a las que los sospechosos no opusieron resistencia, se hizo una primera inspección visual de la embarcación en busca de la posible existencia de fardos de hachís. Así, después de examinar las distintas áreas de mercante, se localizó en una determinada zona del suelo un área sospechosa donde había «pintura fresca».
OCULTO EN UN DOBLE FONDO
Ante las sospechas levantadas, se hizo un examen más exhaustivo hasta comprobar que el área había sido recientemente alterada. De esta manera, se ha determinado que, entre pasadas las 2:00 horas y el abordaje del barco, se había depositado droga en un doble fondo del barco, que posteriormente fue cerrado, soldado y pintado, de forma que incluso «se añadieron elementos para disimular que tuviera una cierta antigüedad, simulando que estuviera sucio».
Así las cosas, tras hallar el escondite del estupefaciente, se dio autorización para el traslado del barco hasta el Puerto de Almería. Por el momento, los investigadores desconocen el origen y destino final que tendría este cargamento que operaba en la Ruta del Mediterráneo Oriental, donde ya se han intervenido más de doce embarcaciones con grandes cantidades de droga.
La operación ha sido coordinada por el Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional y la Fiscalía Antidroga, y se inició sobre las 2:15 horas, después de que un helicóptero de Vigilancia Aduanera observara una embarcación semirrígida junto al mercante 'San Trela' ejecutando el trasbordo, presuntamente, de una serie de fardos de hachís.
Ante esta situación, se produjo un seguimiento del mercante, con bandera de la República Democrática del Congo, hasta que a las 07:00 horas se produjo el abordaje del mismo mediante las patrulleras del servicio de aduanas de la Agencia Tributaria 'Décimo aniversario', de Málaga, y 'ALCA', de Almería.
De esta manera, los agentes han detenido a la tripulación, de origen sirio, entre los que había cinco marineros y un capitán, quien fue conducido hasta el Puerto de Almería en la mañana de este miércoles para ejecutar la inspección del navío, a cargo del Juzgado de Instrucción número 1 de Almería.
Tras estas detenciones, a las que los sospechosos no opusieron resistencia, se hizo una primera inspección visual de la embarcación en busca de la posible existencia de fardos de hachís. Así, después de examinar las distintas áreas de mercante, se localizó en una determinada zona del suelo un área sospechosa donde había «pintura fresca».
OCULTO EN UN DOBLE FONDO
Ante las sospechas levantadas, se hizo un examen más exhaustivo hasta comprobar que el área había sido recientemente alterada. De esta manera, se ha determinado que, entre pasadas las 2:00 horas y el abordaje del barco, se había depositado droga en un doble fondo del barco, que posteriormente fue cerrado, soldado y pintado, de forma que incluso «se añadieron elementos para disimular que tuviera una cierta antigüedad, simulando que estuviera sucio».
Así las cosas, tras hallar el escondite del estupefaciente, se dio autorización para el traslado del barco hasta el Puerto de Almería. Por el momento, los investigadores desconocen el origen y destino final que tendría este cargamento que operaba en la Ruta del Mediterráneo Oriental, donde ya se han intervenido más de doce embarcaciones con grandes cantidades de droga.