Ramiro Téllez: «El PP de ahora representa lo mismo que el PSOE del 82»

El candidato de VOX a la Alcaldía de Almería acusa al Partido Popular de haberse «ido a la izquierda», y a la Junta, de estar «aniquilando» las tradiciones almerienses


Ramiro Téllez, candidato de VOX a la alcaldía de Almería
PABLO REQUENA / 22·05·2015

Ramiro Téllez acude a nuestra cita a la hora convenida. Vestido de sport y con aire desenfadado, nadie sospecharía que este profesor universitario de 45 años se encuentra inmerso en plena campaña electoral. Luce, para reivindicarlo, una chapa en el pecho y una llamativa bolsa de color verde con el anagrama de VOX bajo su brazo derecho. Nos saludamos y tomamos asiento en una cafetería del Paseo Marítimo. El ambiente es quizá demasiado bullicioso para una entrevista, pero tras una pequeña prueba de sonido decidimos quedarnos.


PREGUNTA: Dígame, ¿por qué cree que está capacitado para ser alcalde de Almería?

RESPUESTA: Quien me conoce sabe que soy poco amigo de cursilerías, pero sí te diré que estoy profundamente enamorado de mi ciudad. Se puede querer a Almería tanto como yo, pero no más. Siempre he vendido la marca Almería allá donde he estado, hasta el punto que un amigo mío me dice que soy tan españolista como regionalista, y a eso contesto que sí, que así es. Luego, siempre he tenido el gusanillo de la política, y en diversas ocasiones me han asegurado que valdría para político, para gestor público. Tengo mis ideas claras, y los militantes de VOX han dado el visto bueno a que opte a luchar por mi ciudad, así que aquí estoy.

P: Su formación se define como liberal. ¿Podría explicarme, a grandes rasgos, en qué se diferencia de otras formaciones que invocan el liberalismo como C’s o el Partido Popular?

El dinero tiene que estar en el bolsillo de la gente, y no de los políticos.
R: Me encanta esa pregunta. El PP dice que es liberal, pero al llegar al poder lo primero que ha hecho ha sido subir impuestos; es decir, dice una cosa y hace la contraria. Una analogía: esto es igual que si un médico —el PP— ve a otro doctor —el PSOE— tratando el dolor de cabeza de un paciente —España— dándole martillazos en la cabeza. Ese médico le dice al paciente que cambie de médico, y cuando le toca tratarlo a él, le dice que su dolor de cabeza es mucho más grande de lo que él creía, y que por eso le tiene que dar un martillazo aún mayor —subida de impuestos—. Eso no es serio. Y sobre Ciudadanos, pues hombre, un partido que defiende cosas como mantener el impuesto de sucesiones o de patrimonio no es muy liberal. Yo he oído a un candidato de C´s decir que son liberales a la francesa. ¡Acabáramos! Usan el término ‘liberal’ como les da la gana. Además, es un partido que vive en la indefinición, en el centro cabe todo y no te defines por nada. Por lo cual, dicen que son liberales para unas cosas y socialdemócratas para otras. VOX sí cree en la libertad del individuo frente al Estado, y en que para que haya prosperidad la fiscalidad tiene que ser la mínima posible, y las libertades individuales las máximas. Si te das una vuelta por el mundo, verás que la mayoría de los países más desarrollados tienen una fiscalidad muy baja. Y nosotros proponemos rebajar todos los impuestos, y eliminar los que sea posible eliminar. Y por supuesto, no crear impuestos nuevos. El dinero tiene que estar en el bolsillo de la gente, y no de los políticos.

P: Teniendo en cuenta que el grueso de la fiscalidad depende del Gobierno central y las comunidades autónomas, ¿qué políticas liberales pueden implementarse desde un ayuntamiento?

R: Sí se puede hacer. Cada administración, dentro de sus posibilidades, puede aportar. Desde Almería, reduciendo la fiscalidad y como te decía, los almerienses tendríamos más dinero en el bolsillo. Una de nuestras propuestas es que las inversiones que se hagan tengan una finalidad de creación de riqueza. Es decir, las administraciones públicas reciben un dinero fácil por el que no han luchado como lucha un trabajador por su salario, y por eso tampoco les cuesta mucho trabajo malgastarlo. Por supuesto, manteniendo los servicios sociales básicos. ¿Y cómo se hace eso? Reduciendo en otras áreas. Por ejemplo, España es el país del mundo con más coches oficiales por habitante, lo que es una vergüenza, y nosotros proponemos suprimir esos coches que no nos hacen ninguna falta, y que el político de turno tenga que desplazarse en taxi o en transporte público.

P: Entiendo que, si fuera alcalde, usted prescindiría del coche oficial que emplea el actual regidor.

R: Efectivamente. Hay que prescindir de esos elementos superfluos porque no hay dinero para más, y a la gente no se la puede exprimir como si fuera un limón. Hay que mantener unos gastos que sean asumibles por la ciudadanía.

P: Es usted empleado público, ¿cómo se defiende la reducción de la administración trabajando para ella?

El 82% de lo que se gasta la Junta se emplea en mantener su propia estructura.
R: Hay empleos públicos que son completamente necesarios como sanidad, educación, fuerzas de seguridad o justicia, y hay otros completamente superfluos. Nosotros somos partidarios de mantener las diputaciones provinciales —modificando su funcionamiento— y de suprimir las autonomías. En esto nos diferenciamos de todos los partidos, porque otros proponen suprimir diputaciones pero mantener comunidades. ¿Y por qué defendemos lo primero? En VOX hemos hecho cálculos, y suprimiendo las autonomías, el ahorro sería de 90.000 millones de euros al año. Es una barbaridad para mantener algo que no sirve para nada. En el caso concreto de Andalucía, resulta que el 82% de lo que se gasta la Junta se emplea en mantener su propia estructura; es como el monstruo de las galletas. Mientras tanto, las diputaciones provinciales nunca han generado problemas territoriales ni enfrentamientos entre españoles. Así ha sido desde que se hizo la división de provincias en 1833, mucho antes que las autonomías actuales. Todo el mundo acepta su provincia, y por eso proponemos una descentralización provincial suprimiendo las comunidades autónomas. Por supuesto, no crearíamos parlamentos en cada provincia, porque estaríamos en las mismas o peor. Además, las diputaciones podrían ejercer el papel de gestor de esos municipios lo suficientemente pequeños como para que no venga a cuento que tengan un ayuntamiento.

P: ¿Cuáles son, en su opinión, los tres principales problemas de Almería y qué medidas propone su candidatura para resolverlos?

Almería está muy sucia, y no lo digo yo, sino la OCU.
R: Primero, Almería tiene un problema de reafirmación cultural. Es decir, la cultura de Almería está en peligro de extinción, y hay que recuperarla. Nadie se acuerda de la romería de Monserrate, en la feria todo son vestidos de faralaes, que serán muy bonitos, pero no son nuestros. Aquí, hasta mediados del siglo XX, todo el mundo bailaba parrandas y seguidillas en las fiestas populares. Por tanto, la recuperación de esa identidad cultural propia. ¿Y cómo lo haríamos? Por ejemplo, usando la Feria para fomentar nuestras tradiciones; empleando la caseta municipal ofrecer descuentos del 20% al que vaya vestido con indumentaria tradicional, o creando premios a la mejor refajona… Son sólo pequeños ejemplos. También, desde el Ayuntamiento hay cursos subvencionados de todo tipo, y ahí se podían incluir clases de música tradicional almeriense, porque a la gente, cuando la oye, le suele encantar. Clases de parranda, de trovos… ¿Qué necesidad tenemos nosotros de copiar el carnaval de Cádiz, que no lo hemos tenido nunca, cuando tenemos un género como el trovo? Ese tipo de cosas. Otro problema es la oferta turística que ofrece Almería. España es líder mundial en turismo, pero ¿cuántos de esos turistas vienen a Almería? Más bien pocos. Almería tiene elementos para recibir tanto turismo como Granada o Barcelona, y lo afirmo rotundamente. Nosotros proponemos que Almería sea un destino preferente para cruceros, y la ciudad tiene que ofrecer a esos turistas una ciudad limpia y una serie de atractivos que no se ponen en valor. Almería está muy sucia, y no lo digo yo, sino la OCU. Aunque este no es sólo un problema de la administración, sino también de los propios almerienses que ensucian. Luego, cuando un turista llega al puerto, es una odisea ir andando hasta la Alcazaba. Por eso apostamos por una integración del puerto con la ciudad, haciéndola atractiva, revitalizando La Chanca y Pescadería. Y otro gran problema es el pobre mantenimiento de nuestros monumentos.

P: Precisamente, la preocupación por el deterioro del patrimonio, y en especial por el de la Alcazaba, parece estar muy presente en estas últimas fechas tras el último derrumbe de parte de la muralla sur. ¿Qué propuestas recoge su candidatura en ese sentido?

R: No hay que confundir lo que es legal con lo que es moral; puede haber cosas legales que sean inmorales. No es de recibo que la Alcazaba se esté cayendo a trozos, y que por la posición que tiene Almería como pera de boxeo entre PP y PSOE, se echen la culpa los unos a los otros. Y como tenemos al perro del hortelano instalado en el palacio de San Telmo, yo propongo, porque es un bien moral que la Alcazaba se recupere, que el Ayuntamiento, sin contar con la Junta, que sabemos que no está por la labor, repare y restaure la Alcazaba —no con acero corten, sino bien hecho—. ¿Qué iba a hacer la Junta al respecto? ¿Va a tener la desvergüenza de querellarse contra el Ayuntamiento por haber hecho lo que ellos tenían que haber hecho? Sería el fin político del PSOE en Almería.

P: Pero las llaves de la Alcazaba las tiene la Junta, no el Ayuntamiento. ¿Echarán la puerta abajo?

R: Las llaves las tiene la Junta, pero usted sabe que en un momento dado se abre y se actúa. Porque la Alcazaba es de Almería.

P: ¿Qué infraestructuras necesita, en su opinión, la ciudad de Almería?

El tren a Granada tarda ahora 30 minutos más que hace 13 años, y con el de Sevilla ocurre algo igual.
R: Almería necesita de todo. El tren a Granada tarda ahora 30 minutos más que hace 13 años, y con el de Sevilla ocurre algo igual. Eso, por no hablar del Talgo a Madrid o del AVE, que parece que a la ministra Pastor se le olvida licitar los tramos de nuestra provincia. Creo que el AVE sufrirá el mismo destino que aquel Euromed que nos prometieron para 2005, y que quedó en el olvido. Si vamos por carretera, recordemos que la que iba a ser autovía del 92 acabó siendo la autovía del 2003; muy curioso que, en 1992, la autovía terminaba en la linde provincial con Almería, y tardó once años en llegar a la capital. La autovía del Almanzora sigue sin hacerse… ¿Aviones? Billetes muy caros, y las pocas compañías de bajo coste que quieran venir, porque apenas se promociona este destino turístico. Sobre todo, infraestructuras de transporte de personas y mercancías.

P: ¿Cómo valora la actuación de Rodríguez- Comendador al frente del Consistorio?

R: Tengo sentimientos contrapuestos con él. Sé que ha intentado hacer lo mejor para Almería, y creo que lo ha hecho mejor de lo que lo hubiera hecho el PSOE, pero eso no quita que haya muchas actuaciones con las que no estoy de acuerdo. Por ejemplo, en el caso del Toblerone creo que el PP podría haber actuado mucho mejor, pero actuó con la inercia de la vieja política.

P: ¿Usted habría conservado el Toblerone?

R: Yo lo habría conservado con la propuesta que me hubieran hecho los almerienses. Es decir, nosotros proponemos una concejalía para recabar la opinión ciudadana sobre este tipo de temas. Es algo que se hace en muchas ciudades británicas, en las que los vecinos envían sus propuestas para embellecer la ciudad, y esas sugerencias se someten a referéndum. En otras ciudades suizas, sabemos que el pueblo ha echado para atrás macroproyectos de ciertos alcaldes votando en contra. Así, cuando haya un proyecto de gran calado, que supere cierta inversión, no se podrá hacer si ese proyecto no estaba en el programa electoral del partido que lo propone, y tendrá que recurrir al voto inviolable de la gente. Con el Toblerone, habríamos hecho esto; recabar la opinión de los almerienses, porque seguro que hay uno o dos ciudadanos con propuestas fantásticas que no se le habían ocurrido antes a nadie para conservar ese prisma trigonal tumbado de proporciones gigantescas, símbolo de la arquitectura industrial, para generar riqueza. Podría servir para un palacio de congresos, un jardín botánico, un museo ferroviario, integrarlo con el Cable Inglés, que también está infrautilizado…

P: Bueno, ¿y cómo lo ve de cara al día 24? Los sondeos no parecen muy halagüeños…

Somos el partido de la gente que está desencantada de la vieja política y que no quieren optar entre ladrones o comunistas.
R: Eso lo sabemos. Los comienzos son difíciles, y nosotros existimos desde hace un año y tres meses. Ciudadanos ha tardado diez años en ser lo que son, y por ejemplo, en las elecciones andaluzas de 2011 recibió unos 6.000 votos en toda Andalucía —teniendo años de vida a sus espaldas—. En las últimas andaluzas, VOX recibió 18.000 votos con mucho menos tiempo de existencia. No estamos tan mal; somos el partido de la gente que está desencantada de la vieja política y que no quieren optar entre ladrones o comunistas. Somos gente decente y honrada, y sabemos hacer que una ciudad prospere, porque vamos a aplicar recetas que ya han funcionado en otros lugares.

P: Hagamos un poco de política ficción: si la Alcaldía dependiese de su apoyo, ¿a quién preferiría otorgárselo? ¿Y a quién no se lo concedería bajo ningún concepto?

R: VOX jamás pactará ni con independentistas, que no es el caso de Almería, ni con Podemos, porque estamos en las antípodas. Y en cuanto a otros partidos… pues lógicamente, un partido socialdemócrata lo va a tener más difícil con nosotros que uno más liberal; pero eso hablando de economía, porque, en otros aspectos, eso no excluye acuerdos en otros temas, como en cultura, o en darle voz a la gente. Se podrían hacer pactos puntuales sobre temas concretos, y prefiero esto a un pacto global para toda la legislatura.

P: ¿Está VOX a la derecha del Partido Popular?

R: El PP se ha ido tanto a la izquierda… Un ejemplo; en las elecciones andaluzas, la número 8 del PP de Málaga dijo que ella era socialdemócrata, y que en Málaga el PP representa a un electorado de centro izquierda. Y a nadie le cabe duda de que el PP de ahora representa lo mismo que el PSOE del 82. Para mí es indistinguible. Y claro; cualquier cosa que no sea eso, ya parece, como dicen algunos, que somos la extrema derecha. Pues no; somos el partido liberal conservador que nunca ha existido en España desde la Transición, y creemos que hacemos mucha falta. A mí esta acusación de que somos extrema derecha me hace mucha gracia. Si pregunto si el Frente Nacional Francés es de extrema derecha, tú me dirás que sí, y yo también lo creo. Pero si te fijas en sus propuestas, son indistinguibles de las propuestas de Podemos. Se diferencian sólo en una cosa; el Frente Nacional es patriota, y a Podemos parece que le da alergia el concepto de España. En todo lo demás coinciden, porque ambos defienden un Estado fuerte frente a un individuo débil, y nosotros defendemos lo contrario.

P: Y ya para terminar: ¿Almería es Andalucía?

Desde el Palacio de San Telmo están aniquilando nuestra cultura tradicional levantina.
R: De todas las preguntas, es la de más fácil respuesta para mí. La respuesta, claramente, es no. No lo hemos sido nunca, ni histórica, ni social ni culturalmente. Jamás. Cuando te he dicho lo de recuperar nuestras tradiciones culturales, es porque desde el Palacio de San Telmo están aniquilando nuestra cultura tradicional levantina. Yo amo profundamente Almería, y quiero que esa cultura se mantenga. Si preguntas en el resto de España si Murcia es Andalucía, te dirán claramente que no. Y entre un murciano y un almeriense apenas hay diferencias. Y no estoy diciendo con esto que los almerienses seamos murcianos; lo que digo es que nuestros vínculos culturales con el levante son mucho más fuertes que los vínculos que mantienen a las provincias andaluzas unidas entre sí. Tras la reconquista, Almería se repobló con gente del levante, y luego está el hecho de que, en el famoso referéndum del 28-F, dijimos que no, y nos metieron en donde no queríamos estar mediante el mayor fraude de ley de la Constitución Española, recién aprobada por aquel entonces.