La Audiencia Provincial de Almería dirimirá si, junto a un socio, simuló una deuda contra su exmujer para hacerse con una finca
EUROPA PRESS / 18·05·2015
El actor italiano Fabio Testi será enjuiciado este lunes en la Audiencia Provincial de Almería por urdir presuntamente una estafa procesal con un socio, el también acusado G.V., por la que habría logrado «simular una deuda irreal» contra su ex mujer y conseguido hacerse con una finca de la que habrían obtenido un beneficio de 146.000 euros.
En el juicio, señalado ante el tribunal de la Sección Primera, ambos se enfrentan a una petición por parte del Ministerio Fiscal de dos años de prisión y multa de 12 meses a razón de 12 euros al día. Solicita, asimismo, que indemnicen conjunta y solidariamente a la perjudicada con la misma cuantía que obtuvieron supuestamente de la venta de la finca.
Según recoge el escrito de calificación provisional, el actor y su socio «se pusieron de acuerdo para evitar» que la exesposa de Testi «pudiera compensar» la deuda contraída por él en «el abono de las pensiones de alimentos» que le debía entregar en virtud de la sentencia de separación si él reclamaba judicialmente el pago de unas letras de cambio por valor de 100.000.000 liras que ella emitió a su favor en octubre de 1994.
Así, Fabio Testi le «endosó» las referidas letras de cambio a G.V. para que «fuera este quien exigiera» en la vía judicial su cumplimiento, y lo hizo, al igual que su socio según remarca el Ministerio Público, «siendo sabedores y conscientes» de que ni Testi ni su ex mujer «adeudaban cantidad alguna» a G.V.
Consiguieron supuestamente «simular una deuda irreal» que, en el año 2000, fue ejecutada por un tribunal civil de Roma que ordena que el ex matrimonio abonase conjunta y solidariamente al acusado G.V. la suma de 200.000.000 liras.
Un año después, continúa relatando el fiscal, el socio del actor, quien «sufragó íntegramente los gastos» del proceso judicial, presentó en el Juzgado de Primera Instancia 5 de Almería una demanda de ejecución de sentencia extranjera y solicitó el embargo de una finca propiedad de la perjudicada, cuya titularidad le fue finalmente concedida por adjudicación judicial mediante un auto de aprobación de remate dictado en 2003.
La presunta estafa procesal se habría culminado en 2006 cuando ambos socios vendieron a una tercera persona, que no tenía «conocimiento del ardid» y, por tanto, compradora de buena fe, la finca y obtuvieron supuestamente un beneficio de 146.000 euros, «que incorporaron a su patrimonio, dejando» a la ex «privada de dicho bien», según concluye el escrito de acusación.
En el juicio, señalado ante el tribunal de la Sección Primera, ambos se enfrentan a una petición por parte del Ministerio Fiscal de dos años de prisión y multa de 12 meses a razón de 12 euros al día. Solicita, asimismo, que indemnicen conjunta y solidariamente a la perjudicada con la misma cuantía que obtuvieron supuestamente de la venta de la finca.
Según recoge el escrito de calificación provisional, el actor y su socio «se pusieron de acuerdo para evitar» que la exesposa de Testi «pudiera compensar» la deuda contraída por él en «el abono de las pensiones de alimentos» que le debía entregar en virtud de la sentencia de separación si él reclamaba judicialmente el pago de unas letras de cambio por valor de 100.000.000 liras que ella emitió a su favor en octubre de 1994.
Así, Fabio Testi le «endosó» las referidas letras de cambio a G.V. para que «fuera este quien exigiera» en la vía judicial su cumplimiento, y lo hizo, al igual que su socio según remarca el Ministerio Público, «siendo sabedores y conscientes» de que ni Testi ni su ex mujer «adeudaban cantidad alguna» a G.V.
Consiguieron supuestamente «simular una deuda irreal» que, en el año 2000, fue ejecutada por un tribunal civil de Roma que ordena que el ex matrimonio abonase conjunta y solidariamente al acusado G.V. la suma de 200.000.000 liras.
Un año después, continúa relatando el fiscal, el socio del actor, quien «sufragó íntegramente los gastos» del proceso judicial, presentó en el Juzgado de Primera Instancia 5 de Almería una demanda de ejecución de sentencia extranjera y solicitó el embargo de una finca propiedad de la perjudicada, cuya titularidad le fue finalmente concedida por adjudicación judicial mediante un auto de aprobación de remate dictado en 2003.
La presunta estafa procesal se habría culminado en 2006 cuando ambos socios vendieron a una tercera persona, que no tenía «conocimiento del ardid» y, por tanto, compradora de buena fe, la finca y obtuvieron supuestamente un beneficio de 146.000 euros, «que incorporaron a su patrimonio, dejando» a la ex «privada de dicho bien», según concluye el escrito de acusación.