Y el PP andaluz rechaza compararlo con otros casos de corrupción... distintos al de los ERE
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Manuel García (en segundo plano), durante una rueda de prensa conjunta con Sánchez Teruel |
ALMERÍA HOY / 11·11·2014
Manuel García, secretario general del PSOE en Roquetas del Mar, ha exigido hoy a Gabriel Amat su dimisión como alcalde de la localidad. García ha declarado que Amat debería dimitir «por responsabilidad y ética» para evitar que se vincule «su situación personal con la imagen del Ayuntamiento».
El portavoz socialista ha realizado estas declaraciones tras el pleno municipal celebrado ayer que rechazó, con los votos del PP, la creación de una comisión especial de investigación sobre el caso La Fabriquilla.
Para García, resulta «incomprensible» que el primer edil impida la puesta en marcha de dicha comisión, toda vez que pretende arrojar luz sobre procedimientos judiciales que afectan al Consistorio, y más aún en un momento en que los ciudadanos están demandando máxima transparencia a las instituciones.
Por su parte, el PP de Andalucía, en palabras de su vicesecretaria general, Virginia Pérez, rechazaba comparar este asunto con otros presuntos casos de corrupción, ya que la actuación investigada «contaba con el visto bueno de los interventores y secretarios» del Ayuntamiento; mientras que en casos como el de los ERE de Andalucía, la Intervención General había avisado de que «se saltaban todos los procedimientos».
El portavoz socialista ha realizado estas declaraciones tras el pleno municipal celebrado ayer que rechazó, con los votos del PP, la creación de una comisión especial de investigación sobre el caso La Fabriquilla.
Para García, resulta «incomprensible» que el primer edil impida la puesta en marcha de dicha comisión, toda vez que pretende arrojar luz sobre procedimientos judiciales que afectan al Consistorio, y más aún en un momento en que los ciudadanos están demandando máxima transparencia a las instituciones.
Por su parte, el PP de Andalucía, en palabras de su vicesecretaria general, Virginia Pérez, rechazaba comparar este asunto con otros presuntos casos de corrupción, ya que la actuación investigada «contaba con el visto bueno de los interventores y secretarios» del Ayuntamiento; mientras que en casos como el de los ERE de Andalucía, la Intervención General había avisado de que «se saltaban todos los procedimientos».