"Las reglas de la guerra son claras: Los civiles, incluidos el personal médico y los trabajadores humanitarios, deben estar siempre protegidos y nunca ser atacados"
ALMERÍA HOY / 18·08·2022
Nuestro mundo continúa siendo sacudido por conflictos violentos y desastres naturales destructivos que a menudo empujan a las comunidades locales a crisis humanitarias.
Antes del Día Mundial de la Asistencia Humanitaria de 2022, honramos a todos aquellos que trabajan en primera línea, que constantemente ponen en riesgo sus propias vidas para salvar a otros y reducir el sufrimiento humano. En 2022, los ataques contra trabajadores humanitarios provocaron la muerte de 40 trabajadores humanitarios, el secuestro de 136 y heridas a 68.
Las reglas de la guerra son claras. Los civiles, incluidos el personal médico y los trabajadores humanitarios, deben estar siempre protegidos y nunca ser atacados. Todas las partes de cualquier conflicto deben respetar y seguir el Derecho Internacional Humanitario, que no es una elección, sino una obligación.
Este año ha habido innumerables violaciones del derecho internacional humanitario, ya que las partes en conflicto descuidan a los civiles que quedan atrapados en el fuego cruzado. Algunos de los ataques más espantosos han tenido lugar justo en la frontera de la UE, ya que Rusia no muestra piedad a la población civil de Ucrania.
La invasión de Rusia no solo provocó un aumento vertiginoso de las necesidades humanitarias en Ucrania, sino que tuvo efectos dramáticos en todo el mundo. A medida que se bloquean millones de toneladas de cereales en Ucrania, la guerra ha empeorado una crisis alimentaria mundial ya grave, sin paralelo a lo que hemos visto antes.
Las personas más afectadas por la subida de los precios y la escasez de alimentos son aquellas cuyo acceso a los alimentos ya se ha visto obstaculizado por los conflictos, el cambio climático y los efectos de la pandemia de COVID-19. Las poblaciones de Sudán del Sur, Etiopía, Somalia, Nigeria, Yemen y Afganistán corren el riesgo de sufrir hambruna, mientras que muchos más países se enfrentan a una grave inseguridad alimentaria.
La UE ha aumentado significativamente su financiación para luchar contra la crisis alimentaria mundial y estamos invitando a la comunidad internacional de donantes a hacer lo mismo. Así es como nosotros, como donantes, podemos apoyar la dedicación desinteresada de los trabajadores humanitarios para entregar alimentos, atención médica y refugio, pero también esperanza, a las comunidades más vulnerables del mundo.
Fondo
El Día Mundial de la Asistencia Humanitaria conmemora el aniversario del bombardeo de 2003 de la sede de la ONU en Bagdad, Irak, cuando 22 trabajadores humanitarios perdieron la vida.
Según las Naciones Unidas, 235 millones de personas necesitaban asistencia humanitaria en 2021, que fue el número más alto registrado en décadas. En 2022, esta cifra ha aumentado considerablemente y es probable que supere la previsión inicial de 274 millones, ya que el cambio climático y los conflictos han exacerbado aún más la vulnerabilidad de las personas ante las crisis humanitarias. La UE, como segundo mayor donante del sistema de las Naciones Unidas, proporciona la mayor parte de su financiación al Programa Mundial de Alimentos (PMA), seguida del PNUD, UNICEF y ACNUR.
La UE, junto con sus Estados miembros, se encuentra entre los principales donantes de ayuda humanitaria del mundo. La Comisión Europea proporcionará una financiación humanitaria de casi 11 500 millones de euros durante el período 2021-2027.
Las acciones humanitarias de la UE se basan en los cuatro principios de la ayuda humanitaria: humanidad, imparcialidad, neutralidad e independencia.
Antes del Día Mundial de la Asistencia Humanitaria de 2022, honramos a todos aquellos que trabajan en primera línea, que constantemente ponen en riesgo sus propias vidas para salvar a otros y reducir el sufrimiento humano. En 2022, los ataques contra trabajadores humanitarios provocaron la muerte de 40 trabajadores humanitarios, el secuestro de 136 y heridas a 68.
Las reglas de la guerra son claras. Los civiles, incluidos el personal médico y los trabajadores humanitarios, deben estar siempre protegidos y nunca ser atacados. Todas las partes de cualquier conflicto deben respetar y seguir el Derecho Internacional Humanitario, que no es una elección, sino una obligación.
Este año ha habido innumerables violaciones del derecho internacional humanitario, ya que las partes en conflicto descuidan a los civiles que quedan atrapados en el fuego cruzado. Algunos de los ataques más espantosos han tenido lugar justo en la frontera de la UE, ya que Rusia no muestra piedad a la población civil de Ucrania.
La invasión de Rusia no solo provocó un aumento vertiginoso de las necesidades humanitarias en Ucrania, sino que tuvo efectos dramáticos en todo el mundo. A medida que se bloquean millones de toneladas de cereales en Ucrania, la guerra ha empeorado una crisis alimentaria mundial ya grave, sin paralelo a lo que hemos visto antes.
Las personas más afectadas por la subida de los precios y la escasez de alimentos son aquellas cuyo acceso a los alimentos ya se ha visto obstaculizado por los conflictos, el cambio climático y los efectos de la pandemia de COVID-19. Las poblaciones de Sudán del Sur, Etiopía, Somalia, Nigeria, Yemen y Afganistán corren el riesgo de sufrir hambruna, mientras que muchos más países se enfrentan a una grave inseguridad alimentaria.
La UE ha aumentado significativamente su financiación para luchar contra la crisis alimentaria mundial y estamos invitando a la comunidad internacional de donantes a hacer lo mismo. Así es como nosotros, como donantes, podemos apoyar la dedicación desinteresada de los trabajadores humanitarios para entregar alimentos, atención médica y refugio, pero también esperanza, a las comunidades más vulnerables del mundo.
Fondo
El Día Mundial de la Asistencia Humanitaria conmemora el aniversario del bombardeo de 2003 de la sede de la ONU en Bagdad, Irak, cuando 22 trabajadores humanitarios perdieron la vida.
Según las Naciones Unidas, 235 millones de personas necesitaban asistencia humanitaria en 2021, que fue el número más alto registrado en décadas. En 2022, esta cifra ha aumentado considerablemente y es probable que supere la previsión inicial de 274 millones, ya que el cambio climático y los conflictos han exacerbado aún más la vulnerabilidad de las personas ante las crisis humanitarias. La UE, como segundo mayor donante del sistema de las Naciones Unidas, proporciona la mayor parte de su financiación al Programa Mundial de Alimentos (PMA), seguida del PNUD, UNICEF y ACNUR.
La UE, junto con sus Estados miembros, se encuentra entre los principales donantes de ayuda humanitaria del mundo. La Comisión Europea proporcionará una financiación humanitaria de casi 11 500 millones de euros durante el período 2021-2027.
Las acciones humanitarias de la UE se basan en los cuatro principios de la ayuda humanitaria: humanidad, imparcialidad, neutralidad e independencia.
