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PASEO ABAJO/ Juan Torrijos
La supervivencia en la política no deja de sorprendernos cada día. Creí haberlo visto todo, estaba equivocado. Todavía hay capacidad para la sorpresa entre la clase que nos gobierna, y en estos días de nominaciones y candidaturas aparece de nuevo.
El PP nos sorprendía hace cuatro años con la presencia de Maribel Sánchez en el puesto número uno de la lista al Parlamento Andaluz por Almería, siendo la número tres Carmen Crespo. No era muy normal que una mujer que había demostrado a lo largo de los años su valía en el partido quedara relegada al tercer puesto. Pero es lo que quiso su partido.
¿Tuvo algo que ver el entonces presidente del PP, Gabriel Amat?
Se comentaba en aquellos meses que no había buenas relaciones entre ellos.
Maribel Sánchez, mientras tanto, era una perfecta desconocida en los mentideros más importantes del Partido Popular, a la que se le adjudicaba la cabecera de la lista. Es lo que propuso y quiso el partido.
¿Tuvo algo que ver en este nombramiento el presidente del PP, que por entonces era Gabriel Amat?
Días después de que Moreno lograra que los votos de Cs y de Vox le dieron la presidencia de la Junta, Maribel dejaba el Parlamento Andaluz, se olvidaba de su número uno en la lista y lograba auparse a la delegación de gobierno de la Junta en la provincia. Se convertía así en el alter ego de Juan Manuel Moreno Bonilla en Almería.
Una política casi desconocida en los medios sociales de Almería que lograba un puesto en el que labrarse una excepcional carrera política, o eso parecía.
Llega el momento de la elaboración de la actual lista al parlamento por Almería y se cambian las tornas. Carmen Crespo ocupa el puesto que debió llevar hace cuatro años, el primero, y Maribel Sánchez, que imaginábamos no iría en la candidatura al ser la señora delegada de gobierno, la alter ego del Moreno, vemos con sorpresa que ocupa el puesto tres, el que hace cuatro años ocupaba la consejera de agricultura, doña Carmen Crespo.
Alguien podría alegar que doña Maribel, como los cangrejos, camina hacia atrás. Y eso, en política, no es un buen augurio. No podemos pensar que es un premio lo que le ofrece Moreno Bonilla a la señora Sánchez Torregrosa, más bien al contrario.
¿Están pensando en un futuro Maribel abandonar la delegación del gobierno de la Junta?
¿Quién lo venía pensando, Moreno o la propia Sánchez Torregrosa?
¿Se ha cansado Maribel de la delegación?
¿Se trabaja poco, mucho, demasiado?
¿Es Moreno el que se ha cansado del trabajo de su delegada en Almería?
¿Ha trabajado poco, bien, regular, mal?
Si Moreno tenía previsto que Maribel siguiera de delegada no había motivo para que vaya en la candidatura y en el tercer puesto, lo que no deja de ser una retroceso en su carrera política tras encabezarla hace cuatro años. Claro que, si lo que se quería es que dejara de ser delegada, es darle una salida, un sueldo, no dejarla abandonada del todo.
¿Tendrá algo que ver el hombre que cierra la candidatura por Almería para el 19 de junio?
Esperemos acontecimientos, pero el andar del cangrejo no apunta nada bueno en la carrera política de la ya ex-delegada de la Junta en Almería.
El PP nos sorprendía hace cuatro años con la presencia de Maribel Sánchez en el puesto número uno de la lista al Parlamento Andaluz por Almería, siendo la número tres Carmen Crespo. No era muy normal que una mujer que había demostrado a lo largo de los años su valía en el partido quedara relegada al tercer puesto. Pero es lo que quiso su partido.
¿Tuvo algo que ver el entonces presidente del PP, Gabriel Amat?
Se comentaba en aquellos meses que no había buenas relaciones entre ellos.
Maribel Sánchez, mientras tanto, era una perfecta desconocida en los mentideros más importantes del Partido Popular, a la que se le adjudicaba la cabecera de la lista. Es lo que propuso y quiso el partido.
¿Tuvo algo que ver en este nombramiento el presidente del PP, que por entonces era Gabriel Amat?
Días después de que Moreno lograra que los votos de Cs y de Vox le dieron la presidencia de la Junta, Maribel dejaba el Parlamento Andaluz, se olvidaba de su número uno en la lista y lograba auparse a la delegación de gobierno de la Junta en la provincia. Se convertía así en el alter ego de Juan Manuel Moreno Bonilla en Almería.
Una política casi desconocida en los medios sociales de Almería que lograba un puesto en el que labrarse una excepcional carrera política, o eso parecía.
Llega el momento de la elaboración de la actual lista al parlamento por Almería y se cambian las tornas. Carmen Crespo ocupa el puesto que debió llevar hace cuatro años, el primero, y Maribel Sánchez, que imaginábamos no iría en la candidatura al ser la señora delegada de gobierno, la alter ego del Moreno, vemos con sorpresa que ocupa el puesto tres, el que hace cuatro años ocupaba la consejera de agricultura, doña Carmen Crespo.
Alguien podría alegar que doña Maribel, como los cangrejos, camina hacia atrás. Y eso, en política, no es un buen augurio. No podemos pensar que es un premio lo que le ofrece Moreno Bonilla a la señora Sánchez Torregrosa, más bien al contrario.
¿Están pensando en un futuro Maribel abandonar la delegación del gobierno de la Junta?
¿Quién lo venía pensando, Moreno o la propia Sánchez Torregrosa?
¿Se ha cansado Maribel de la delegación?
¿Se trabaja poco, mucho, demasiado?
¿Es Moreno el que se ha cansado del trabajo de su delegada en Almería?
¿Ha trabajado poco, bien, regular, mal?
Si Moreno tenía previsto que Maribel siguiera de delegada no había motivo para que vaya en la candidatura y en el tercer puesto, lo que no deja de ser una retroceso en su carrera política tras encabezarla hace cuatro años. Claro que, si lo que se quería es que dejara de ser delegada, es darle una salida, un sueldo, no dejarla abandonada del todo.
¿Tendrá algo que ver el hombre que cierra la candidatura por Almería para el 19 de junio?
Esperemos acontecimientos, pero el andar del cangrejo no apunta nada bueno en la carrera política de la ya ex-delegada de la Junta en Almería.
