A Carmen Mateos la han expulsado de Podemos. (Carmen, quo vadis?)


..

PASEO ABAJO/ Juan Torrijos

Has buscado que te echen de Podemos, Carmen. No me digas que no, que se te han visto las costuras en más de una y de dos ocasiones en estos años. No has tenido la más mínima consideración con la gente del partido con el que te presentaste a las municipales. No les ha dado explicación alguna a los dirigentes de Podemos sobre tus andanzas por los pasillos de la casa consistorial. Has estado buscando que te echen y, al final, como era de esperar, te han dado la patada en el noble tafanario.

Carmen, lo has conseguido. Ya tienes la libertad para irte al partido que te apetezca, si es que tienes interés en seguir en la vida política almeriense. Y, si no es por el interés de seguir en el servicio a los demás, no entiendo que no hayas abandonado el trabajo municipal y dejar que otro compañero siga en esa tarea. Por lo que se puede colegir, al no haber abandonado la concejalía hasta el día de hoy, es que hay algún otro interés oculto que todavía no nos has dado a conocer. ¡Ay, Carmen, Carmen!

Por cierto. Carmen, quo vadis?

Lo que no tengo muy claro es que alguien te vaya a abrir las puertas para que puedas seguir en el Ayuntamiento, se preguntarán y, entiende que con cierta razón: ¿No tendrás con ellos en el futuro el mismo comportamiento que le has ofrecido a los colegas de Podemos?

Comprende que va a ser muy difícil que se pueda confiar de nuevo en tu trabajo político, pero no te apures demasiado, la izquierda extrema va a estar tan dividida en las próximas, que lo mismo encuentras a algunos pamplinas que vuelven a confiar en ti. ¿Ya los tienes? No me digas. Al final “siempre hay un roto, para un descosío”

Algo parecido le puede ocurrir al hijo del notario, que como no lo quiera y lo imponga el nieto de Monterreal en el PP, no creo que ningún otro grupo político se vaya a fiar de él. El caballero en cuestión no tiene la misma suerte que tú, en la derecha y en la extrema, no hay demasiadas alternativas.

En política, los personalismos, cuando no se tiene madera de autentico líder, y son muy pocas las personas que llegan a ese estado de imposición, cuando lo que tenemos que ofrecer es mediocridad, solo traen conflictos internos en los grupos, sean estos sociales, políticos o religiosos.

Tampoco es que tu trabajo haya destacado en estos años en la Corporación de Ramón. Lo que no ha supuesto un blasón que defienda tu paso por el Ayuntamiento. Y la corola de tu abstención a los últimos presupuestos ha sido la gota que ha colmado el vaso de tu partido y de la gente que te votó. Incluso de los que no te votaron, y que no entiende las posturas de algunos políticos, en este caso la tuya en ese Pleno.

Ya nos dirás un día de estos a dónde vas. No es que estemos ansiosos por saberlo, sólo la morbosa curiosidad de tener que escribir todos los días sobre vosotros.

Por cierto, ¿qué quieres montar con el hijo del notario?

Ya nos lo contarás un día de estos.

Se me olvidaba. Me encanta la excusa que nos has dado. “La expulsión evita tomar decisiones”. Eso, Carmen, no deja de ser una cobardía.

Lo de problemas de conciencia y otras teorías éticas ya es de lujo. Si existían, ¿por qué no te fuiste hace tiempo de Podemos y del Ayuntamiento?

¿El sueldo? Se entiende la necesidad.

¡Qué te vaya bonito en tu nueva vida política!