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PASEO ABAJO/ Juan Torrijos
Los de la Red Eléctrica se han buscado unos enemigos en el norte de nuestra provincia. Decir Red Eléctrica es cómo decir Pedro Sánchez. Y ya se sabe que el señor Sánchez (el que a la hora de subir y crecer hasta la nariz le gana enteros), si en algún sitio manda y con muchos bemoles es en el PSOE. Lo que me lleva a preguntarme si esos enemigos que salían hace unos días en el norte de nuestra provincia, unos en coches, otros en tractores, los había incluso andando, por los nuevos vuelos que le quiere dar don Pedro a los nuevos caminos de los cables de alta tensión en esta zona de Almería, lo hacían sabiendo a quién le estaban protestando.
¿Quiénes son esos señores de la llamada Red Eléctrica? ¿Tienen nombre? ¿Un teléfono al que llamar? ¿Un domicilio al que acudir, un chalet donde protestar? ¿Quizás un partido al que responder? Estoy seguro que si buscamos entre los que se sientan en el consejo de administración de la llamada Red Eléctrica nos vamos a encontrar con llamativos nombres de “políticos, políticas y polileches” salidos de los grandes partidos que vienen dominando los últimos cuarenta años en nuestro país. Nombres salidos del PSOE, del PP, supongo que alguno del independentismo vasco, sin olvidarnos del catalán, que intentarán, y seguro que lo logran, llevarse los mejores watios para sus regiones. Son las puertas giratorias, aquellas de las que se quejaba el del moño, pero que no hizo nada por cerrarlas. A este país se le sigue llamando España ¿o ya ha conseguido el señor Rufián que Pedro le cambie el nombre?
Esos caballeros de la Red Eléctrica que encima amenazan con la llegada del AVE. Si no vuelan los cables por donde a ellos les da la gana, el AVE no podrá llegar a Almería. Política de chantaje, de enfrentamiento, de chulería. Y los cables volaran por sus “cataplines” por donde ellos han decidido, ya lo verán.
¿Nos callaremos? Nos callaremos.
En la manifa de hace unos días, donde almerienses de Los Vélez se dieron cita, se vieron algunos alcaldes socialistas, pobretes ellos, a nivel particular. Casi escondidos, pero estuvieron. No, no estaban representando a sus ayuntamientos, eso debía quedar muy claro ante los jefes del partido. Lo hacían a nivel personal. ¡Qué majetes ellos! No querían dejar solos a sus vecinos, por aquellos de los votos dentro de algunos meses, y allí estaba ellos levantando sus voces. Un momento, las voces no las levantaron, estuvieron más bien calladitos, no fuera que algún micrófono, malditos micrófonos, recogieran su voz y se pensaran que ellos estaban criticando a su jefe. Bastante tenían los vecinos con su presencia.
Se les echó de menos a los señores y señoras diputados, diputadas y diputaleches de estas tierras que acampan sus traseros en los escaños del noble salón de los leones, tampoco algún senador con sueldo y piscina, parlamentarios andaluces, más o menos criticones ellos tras los tres años que llevan sin tocar poder en Andalucía y sin pasear sus palmitos por los nuevos “Ángelos”, o los simples diputados provinciales dispuestos a bajar a la capital con cualquier protesta que se preste, siempre que haya dieta que cobrar y unas copas en el Quinto.
Entiendo que el señor Sánchez, con la historia de Ucrania y el trabajo que le está dando no estuviera presente en las tierras del norte almeriense, pero el resto de sus mesnadas, a los que los almerienses pagan sus sueldos con sus impuestos ¿dónde estaban?
No vi sus fotos en la protesta, lo mismo acudieron y no me he enterado, pero si fue así, me gustaría la confirmación para ponerles la merecida medalla a los chicos de la goleta. Esos que pasean su palmito y su músculo por los mares, y a los que solo parece preocuparles lo que ocurre en las playas de este Mediterráneo del sur.
¿Quiénes son esos señores de la llamada Red Eléctrica? ¿Tienen nombre? ¿Un teléfono al que llamar? ¿Un domicilio al que acudir, un chalet donde protestar? ¿Quizás un partido al que responder? Estoy seguro que si buscamos entre los que se sientan en el consejo de administración de la llamada Red Eléctrica nos vamos a encontrar con llamativos nombres de “políticos, políticas y polileches” salidos de los grandes partidos que vienen dominando los últimos cuarenta años en nuestro país. Nombres salidos del PSOE, del PP, supongo que alguno del independentismo vasco, sin olvidarnos del catalán, que intentarán, y seguro que lo logran, llevarse los mejores watios para sus regiones. Son las puertas giratorias, aquellas de las que se quejaba el del moño, pero que no hizo nada por cerrarlas. A este país se le sigue llamando España ¿o ya ha conseguido el señor Rufián que Pedro le cambie el nombre?
Esos caballeros de la Red Eléctrica que encima amenazan con la llegada del AVE. Si no vuelan los cables por donde a ellos les da la gana, el AVE no podrá llegar a Almería. Política de chantaje, de enfrentamiento, de chulería. Y los cables volaran por sus “cataplines” por donde ellos han decidido, ya lo verán.
¿Nos callaremos? Nos callaremos.
En la manifa de hace unos días, donde almerienses de Los Vélez se dieron cita, se vieron algunos alcaldes socialistas, pobretes ellos, a nivel particular. Casi escondidos, pero estuvieron. No, no estaban representando a sus ayuntamientos, eso debía quedar muy claro ante los jefes del partido. Lo hacían a nivel personal. ¡Qué majetes ellos! No querían dejar solos a sus vecinos, por aquellos de los votos dentro de algunos meses, y allí estaba ellos levantando sus voces. Un momento, las voces no las levantaron, estuvieron más bien calladitos, no fuera que algún micrófono, malditos micrófonos, recogieran su voz y se pensaran que ellos estaban criticando a su jefe. Bastante tenían los vecinos con su presencia.
Se les echó de menos a los señores y señoras diputados, diputadas y diputaleches de estas tierras que acampan sus traseros en los escaños del noble salón de los leones, tampoco algún senador con sueldo y piscina, parlamentarios andaluces, más o menos criticones ellos tras los tres años que llevan sin tocar poder en Andalucía y sin pasear sus palmitos por los nuevos “Ángelos”, o los simples diputados provinciales dispuestos a bajar a la capital con cualquier protesta que se preste, siempre que haya dieta que cobrar y unas copas en el Quinto.
Entiendo que el señor Sánchez, con la historia de Ucrania y el trabajo que le está dando no estuviera presente en las tierras del norte almeriense, pero el resto de sus mesnadas, a los que los almerienses pagan sus sueldos con sus impuestos ¿dónde estaban?
No vi sus fotos en la protesta, lo mismo acudieron y no me he enterado, pero si fue así, me gustaría la confirmación para ponerles la merecida medalla a los chicos de la goleta. Esos que pasean su palmito y su músculo por los mares, y a los que solo parece preocuparles lo que ocurre en las playas de este Mediterráneo del sur.
