“Ya ha pasado lo peor de la pandemia”

Aunque asume que no se puede hacer una afirmación definitiva, el delegado provincial de Salud, Juan de la Cruz Belmonte, da por “dominado” al covid. En cualquier caso, pide “actuar con responsabilidad” 



ALMERÍA HOY / 27·09·2021

Belmonte destaca la importancia de las vacunas para conseguirlo. El delegado cree que tenemos que acostumbrarnos a convivir con el coronavirus “igual que con la gripe”, y también al uso de la mascarilla, porque “nos protege de muchas enfermedades”

- Tras año y medio de pandemia, y cuando todos esperábamos en verano un repunte a causa de los movimientos de población, agosto terminó con una sustancial bajada en el número de contagios en la comarca.
- Y ojalá que continúe disminuyendo. Pero no debemos bajar la guardia porque habrá una sexta ola. Es necesario actuar con responsabilidad para minimizar en lo posible los efectos de esta pandemia, como están haciendo los vecinos de la comarca, que se están comportando de manera admirable, y los profesionales de la Sanidad, volcados en esta lucha.
- ¿Podemos decir que estamos venciendo al virus?
- Se está dominando en gran medida gracias a las vacunas, que se están revelando como el arma más poderosa para evitar contagios. Prueba de ello es que, en verano, a pesar de que todos nos hemos relajado, la incidencia de la pandemia ha bajado de forma generalizada. La causa, sin lugar a dudas, ha sido la vacunación. Esto supone una buena noticia de cara al futuro, porque el covid-19 seguirá existiendo como una enfermedad recurrente, igual que la gripe, pero podremos controlarlo.
- ¿Confiaban en un retroceso de la pandemia como el que ha ocurrido en agosto?
- Para ser sinceros, esperábamos datos peores. Sin embargo, analizando lo sucedido, hemos comprobado que, al vacunar primero a las personas más sensibles, los que se han contagiado han sufrido la enfermedad de forma más benigna. Ahora nos importan menos las cifras de contagios porque sabemos que no todos los infectados con el virus están enfermos. Enfermos son los que tenemos que curar en los hospitales.
- Y que pueden saturarlos.
- Efectivamente. La prioridad siempre es evitar el colapso hospitalario. Si aumentan considerablemente los pacientes con covid en planta y en UCI [Unidad de Cuidados Intensivos], nos vemos obligados a disponer recursos que es preciso detraer de otros servicios en que también hacen falta, mermando la atención en esos departamentos y generando problemas que no tendrían por qué existir. Así de simple.
- ¿Han tenido que adoptar decisiones a ciegas, sin conocer el efecto que podrían ejercer sobre una pandemia originada por un virus desconocido?
- Es cierto que, al principio, ni siquiera sabíamos cómo se portaba el ‘bicho’. No obstante, la comunidad internacional, incluyendo gobiernos, universidades, centros hospitalarios, así como laboratorios y empresas privadas, desplegó una red de investigación e intercambio de información como nunca antes, que nos ha permitido controlar la situación generada por esta pandemia. Se fueron identificando los fármacos más eficaces y, finalmente, sintetizando y administrando vacunas que han demostrado ser una potente herramienta. Otro aspecto vital ha sido la información, que nos ha permitido poner en marcha planes de contingencia con un mes de antelación sobre las situaciones previstas.
- ¿Ha pasado ya lo peor de esta pandemia?
- Sí, lo peor ha pasado, salvo sorpresas. Yo soy optimista porque veo constantemente cómo funciona el equipo del que disponemos para combatir al covid-19.
- Con el que estamos condenados a convivir.
- Siempre va a existir, pero la presión hospitalaria será menor.
- ¿Está próximo el fin del uso obligatorio de la mascarilla?
- Yo la lleva en la calle siempre. Lo he asumido como una costumbre. Además, creo que es un equipo muy útil que deberíamos incorporar definitivamente, no sólo mientras dure esta pandemia. Por poner un ejemplo, tendríamos que usarla si salimos a la calle o al trabajo enfermos con gripe. Evitaríamos que otros se contagiaran. Me parece un acto de solidaridad. En lugares masificados, como el transporte público, sería también muy recomendable en cualquier circunstancia, porque nunca sabemos si compartimos asiento o nos cruzamos con algún portador de una enfermedad infecciosa. La mascarilla protege de muchas enfermedades.
- ¿Habrá vacuna española contra el covid-19? Parece que se está haciendo de rogar.
- Está culminando el proceso de investigación y pronto estará disponible, como otras muchas. Servirán para poder disponer de un mayor arsenal. Pfizer comenzó a trabajar en la suya en otoño de 2019. Estamos hablando del mayor productor de vacunas del mundo.
- Hay un sector de la población que mantiene cierto escepticismo frente a las vacunas. No las consideran fiables.
- Como farmacéutico, puedo asegurar que el beneficio supera con creces el riesgo. Todas las homologadas en la actualidad superan ampliamente el 90% de eficacia. Ninguna de las que se administran anualmente contra la gripe llega a ese porcentaje de eficiencia, sin embargo, nadie las pone en tela de juicio. Las vacunas contra el covid tienen menos efectos secundarios que ninguna otra. Aunque, como ocurre con todos los fármacos, te estás metiendo en el cuerpo un ser extraño para enseñarte a combatir el virus. Vacunarse contra el covid-19 es exactamente igual de peligroso que tomarse un paracetamol.
- Entre los escépticos hay algún premio Nobel.
- En el caso de las vacunas contra el covid-19, una prueba contundente es la disminución de contagios que se ha producido a medida que se han ido administrando. Al término del curso escolar, a finales de junio, hubo un incremento masivo de infecciones entre los jóvenes, que aún no había comenzado a vacunarse. A medida que se les ha ido inoculando, han bajado vertiginosamente los casos. Esto son evidencias. Me parece alarmista decir que las vacunas no son efectivas.
- Analizando los datos del covid en la comarca, pese a la disminución de la incidencia de contagios, en el distrito sanitario Levante-Norte se han producido 8 defunciones en agosto, cuando llevábamos más de dos meses sin defunciones.
- En realidad, en agosto han fallecido seis. Los otros dos lo hicieron a finales de julio, aunque no se registraron en ese mes. La edad media de estos difuntos es de 83 años, todos estaban vacunados y presentaban un historial con pluripatologías. A mediados de julio llegaron muchos jóvenes a las plantas y UCIs de los hospitales. Pero ellos son más fuertes, sus organismos se defienden y salen adelante, aunque algunos con efectos secundarios. Estamos hablando de una enfermedad que afecta enormemente al sistema respiratorio.
- ¿Por qué nuestra provincia es una de las que menos daño ha sufrido a causa del covid?
- Básicamente por el equipo humano de que disponemos. Hemos sido pioneros a la hora de adoptar muchas medidas. Por ejemplo, en Almería medicalizamos cuatro residencias de mayores antes que el resto de provincias empezara a hacerlo. Desplazamos el hospital a los centros de mayores en lugar de llevar a los residentes a los hospitales. Fuimos conscientes de que el virus causa más estragos entre los más débiles, y por eso nos afanamos en protegerlos. Además, se lo merecen. Han sido los que nos han permitido llegar a donde estamos con su esfuerzo y trabajo.