Los hosteleros almerienses se sienten "chivos expiatorios" con las terrazas cerradas mientras las calles están llenas

El sector afirma haber llegado a su "punto máximo de aguante"



ALMERÍA HOY / 28·01·2021

El sector hostelero almeriense afirma haber llegado a su "punto máximo de aguante" con un nuevo cierre mientras calles, avenidas, paseos marítimos o parques, aprovechando el buen tiempo, son "escenarios diarios de continuas concentraciones" de no convivientes.

Empresarios y trabajadores del sector se sienten "chivos expiatorios" de dirigentes políticos que "no tienen capacidad"  para frenar la natural interrelación personal en la que se ha focalizado el contagio de la Covid 19 y que parece que "sólo son capaces de visualizar en establecimientos de hostelería".

Por todo ello, la asociación que los agrupa, ASHAL, exige de todas las Administraciones competentes que, "si no son capaces" de controlar estas concentraciones irregulares "permitan como mínimo la apertura de terrazas, estableciendo con criterios científicos y técnicos, el aforo de las mismas, número de personas que pueden sentarse en una misma mesa y condición de los mismos, si deben ser convivientes o no".

Los hosteleros piden normas que, al menos, "no discriminen" a un sector económico que es la segunda actividad en importancia de la provincia tras la agricultura, con miles de empresas y de trabajadores que dependen de la misma.

La asociación de la hostelería almeriense entiende "fuera de toda norma, costumbre o antecedente legal aplicable, que se cierre a un sector por ser foco de puntos de reunión, mientras miles de personas son hacinadas en transportes públicos o se interrelacionan libremente en espacios abiertos, pero no en una terraza de un bar que ocupa este mismo espacio".

Los empresarios del sector son conscientes de que el objetivo de todos es "recuperar" unos índices mínimos de seguridad, piden la colaboración ciudadana para que cumpla "de manera escrupulosa, severa y consciente", todas las medidas sobre higiene, distancia e interrelación personal, ante la convicción de que si no se cumple, volverá a ser la hostelería quien "pagará las consecuencias del comportamiento de unos pocos".

Al respecto, ASHAL recuerda que hay establecimientos de alojamiento turístico o de ocio nocturno, por tan solo poner un ejemplo, que llevan cerrados desde el 14 de marzo, en una situación de "absoluta ruina y que es responsabilidad de todos y cada uno de nosotros el poner fin a este drama".