El Centro de Salud de Antas niega vacunas a dos niños “por estar censados en Madrid”

Su madre pertenece a una conocida familia del pueblo, es presidenta del Grupo de Regantes local y había solicitado el traslado de asistencia sanitaria



ALMERÍA HOY / 23·07·2020

Isabel Alvargonzález se sintió este miércoles extranjera en su propio pueblo cuando le dijeron en el Centro de Salud de Antas que no vacunarían a sus dos hijos “por estar censados en Madrid”.

De conocida familia antense, la vida de Isabel ha transcurrido entre Madrid y Antas, donde mantiene una finca de naranjos que da empleo a cuatro personas, preside la Comunidad de Regantes del pueblo y paga “los impuestos correspondientes”.

También está al corriente con la Seguridad Social, sin embargo, cuando la ha necesitado, “me ha dado con la puerta en las narices, a pesar de que solicité el traslado de comunidad para la asistencia sanitaria antes de venir a Antas en esta ocasión”. Ha sido en la mañana de este miércoles, cuando acudió al Centro de Salud de Antas acompañada de sus dos hijos para que les pusieran las dos vacunas que se administran a los cuatro años de edad.

Ya le habían puesto en el mismo ambulatorio las prescritas a los cuatro meses y al año, pero esta vez la respuesta fue bien diferente. “El enfermero consultó al médico, quien le dijo que no se las pusiera porque estaban censados en Madrid, y que fuera allí a por las vacunas”.

“Yo no estoy aquí por placer sino por trabajo. En Antas está la tierra, los naranjos, y tengo que ocuparme de ellos. Además, no sé cuándo podré volver a Madrid”.

Tras unos minutos de perplejidad ante lo que estaba ocurriendo, así como de “malestar por ser discriminada de esa manera en mi propio pueblo”, Isabel rellenó una hoja con su queja “porque no quiero que nadie pase por lo mismo que mis hijos”. Entonces, el médico cambió de motivos, pero siguió negando las vacunas.

“En esta ocasión me dijo que no podía prescribirlas porque, aunque en Madrid se administren a niños con cuatro años, en Andalucía se ponen a los tres. Yo no pude admitir ese argumento, y le respondí que, por el contrario, más razones había para hacerlo, porque ya iban un año tarde”.

“En cualquier caso, me siento indignada con lo sucedido. Todos somos españoles y pagamos a la Seguridad Social para que nos atienda en España. Que la Junta de Andalucía tenga que pasar factura a Madrid, que lo haga, pero me resulta incomprensible y humillante que no se atienda a mis hijos en un pueblo que también es el suyo”.