Dos años de cárcel para la 'madame' que prostituía a una nigeriana en Cuevas del Almanzora

La Audiencia Provincial también ha condenado a seis meses a la pareja de la procesada.


Imagen de archivo.

ALMERÍA HOY / 13·01·2020

La Audiencia Provincial ha condenado a dos años de prisión a una mujer nigeriana que prostituyó a una compatriota en una cueva, así como a la pareja de la procesada, al que le han sido impuestos seis meses de cárcel por usar documentos con una identidad diferente a la suya.

La sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, declara probado que un desconocido contactó con una nigeriana que se encontraba en una "precaria situación económica en sus país", ofreciéndole su traslado a Cuevas del Almanzora, dónde podría ayudarla a encontrar trabajo y le podría conseguir "papeles".

La mujer aceptó la propuesta con el "deseo de mejorar su vida" y viajó de Nigeria hasta Libia y desde allí hasta Italia a bordo de una patera, ingresando una vez en este país en un campamento de refugiados en el que fue recogida por otra persona que en diciembre de 2017 la trasladó a Cuevas del Almanzora.

Una vez en la localidad almeriense, llegó a una cueva en la que le esperaban la persona que había contactado con ella y la acusada U.V.A., también nigeriana, quienes le comunicaron que "su trabajo consistiría en tener relaciones sexuales con hombres a cambio de dinero, lo que debería hacer para saldar una supuesta deuda de 30.000 euros que habría contraído por su traslado".

Inicialmente se negó a ello pero, "atemorizada por la situación que estaba viviendo, amenazada e incluso golpeada" por U.V. A., "sin documentación, sin conocer a nadie, sin apoyo familiar ni económico", y en un país desconocido del que tampoco conocía el idioma y "sin otra posibilidad de sobrevivir, se vio obligada a ejercer la prostitución".

Según el fallo, la víctima tenía que estar en esta cueva todos los días y a cualquier hora, sin descanso, a disposición de los clientes que solicitasen sus servicios, y debía pagar la totalidad del dinero que obtuviese a U.V.A. o a la otra persona, por esa supuesta deuda.

Durante la vista fue juzgado también el compañero sentimental de U.V.A., de iniciales I.K.D., un camerunés sin relación en estos hechos pero que llegó a juicio por utilizar la identidad de otra persona, teniendo incluso en su poder un permiso de conducir con ese nombre diferente al suyo.

"Asimismo, había aperturado una cuenta bancaria en una entidad bancaria con esa identidad e, igualmente, había contratado una línea telefónica móvil con esos datos. También había firmado un contrato de trabajo" con una empresa de Antas (Almería), bajo esa identificación.

La mujer ha sido condenada a dos años y medio de prisión por un delito relativo a la prostitución, por el que también se le prohíbe comunicarse y aproximarse a menos de 500 metros de la víctima durante diez años, y se le impone el pago de una indemnización de 25.000 euros.

No obstante, ha sido absuelta del delito de trata de seres humanos con fines de explotación sexual, por el que la Fiscalía reclamaba seis años de prisión, porque "no aparece debidamente acreditado que la acusada actuase en connivencia con la persona que contactó con la testigo en Nigeria, que le ayudó a venir a nuestro país"