ALMERÍA HOY / 03·01·2019
La pedanía cuevana de Villaricos ha despedido el año envuelto en la polémica construcción de 35 viviendas sobre parte del yacimiento arqueológico de Baria, y es que vecinos de la localidad ha efectuado pintadas reivindicativas en parte de la malla protectora que rodea la zona en la que ya se está excavando. 'La historia no se vende, Baria tampoco' es uno de los lemas que rezan dichas pintadas.
ALMERÍA HOY ha contactado con miembros de la plataforma 'Salvemos Baria' para conocer un poco mejor el (pen)último atentado contra el patrimonio histórico y cultural de la provincia de Almería.
«Este verano nos encontramos con un cartel —nos cuenta Laura Rodríguez— anunciando una construcción de 35 viviendas. Se quitó el cartel porque al Ayuntamiento no se había presentado ningún tipo de solicitud, ni licencia ni nada, y a raíz de esto creamos un grupo ecologista para movernos y organizarnos mejor. En el puente de diciembre nos encontramos con que está toda la zona pintada en el suelo, y que iban a empezar unas excavaciones. Fuimos al Ayuntamiento de Cuevas, intentamos recopilar toda la información posible, y hay que decir que hasta ahora no nos ha sido posible obtener nada, nos estamos buscando la vida como podemos porque el Ayuntamiento no se está prestando a colaborar en nada», lamenta.
Así, explican que, tras investigar el caso, descubren «que en el año 2015 se produce una segregación del sector 8 de este yacimiento, y tres años más tarde, tras perder la protección, se concede la autorización para el movimiento de tierras. «En esa excavación de urgencia hemos estado vigilando para evitar que sucediera lo que ya ocurrió en 2004; entre otras cosas, constaba en el informe que no habían aparecido restos arqueológicos, pero se encontraron en los montones de tierra que sacaron restos de cerámica, monedas, etc».
«Ahora nos encontramos —prosigue— con que la excavación la está realizando una empresa particular con una malla negra alrededor, y con que la tierra que está sacando la están llevando a una empresa privada sin hacer criba ninguna, con lo cual no sabemos si se están sacando restos importantes o no. Además, nos llegan fotos de los vecinos (como la que ilustra este texto) donde se observan restos cerámicos en la superficie».
Por todo lo anterior, Laura Rodríguez denuncia lo que considera «un atropello a nuestro patrimonio». «Es desgarrador. Para la importancia que tiene el yacimiento de Baria, el tratamiento es desgarrador. Es increíble que sigan pasando estas cosas, la falta de preocupación de las instituciones públicas, que no están prestando ninguna colaboración. Pedimos papeles en el Ayuntamiento hace dos semanas, y no nos han contestado aún. Es una vergüenza».
En ese sentido, apunta que de un tiempo a esta parte están apareciendo pintadas «de vecinos de Villaricos descontentos en las mayas de protección del yacimiento, con frases como 'Baria no se vende', 'La historia de un pueblo no se vende' y cosas por el estilo».
ALMERÍA HOY ha contactado con miembros de la plataforma 'Salvemos Baria' para conocer un poco mejor el (pen)último atentado contra el patrimonio histórico y cultural de la provincia de Almería.
«Este verano nos encontramos con un cartel —nos cuenta Laura Rodríguez— anunciando una construcción de 35 viviendas. Se quitó el cartel porque al Ayuntamiento no se había presentado ningún tipo de solicitud, ni licencia ni nada, y a raíz de esto creamos un grupo ecologista para movernos y organizarnos mejor. En el puente de diciembre nos encontramos con que está toda la zona pintada en el suelo, y que iban a empezar unas excavaciones. Fuimos al Ayuntamiento de Cuevas, intentamos recopilar toda la información posible, y hay que decir que hasta ahora no nos ha sido posible obtener nada, nos estamos buscando la vida como podemos porque el Ayuntamiento no se está prestando a colaborar en nada», lamenta.
Así, explican que, tras investigar el caso, descubren «que en el año 2015 se produce una segregación del sector 8 de este yacimiento, y tres años más tarde, tras perder la protección, se concede la autorización para el movimiento de tierras. «En esa excavación de urgencia hemos estado vigilando para evitar que sucediera lo que ya ocurrió en 2004; entre otras cosas, constaba en el informe que no habían aparecido restos arqueológicos, pero se encontraron en los montones de tierra que sacaron restos de cerámica, monedas, etc».
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| Resto de cerámica captado por un vecino de Villaricos en la zona de excavación de Baria. |
«Ahora nos encontramos —prosigue— con que la excavación la está realizando una empresa particular con una malla negra alrededor, y con que la tierra que está sacando la están llevando a una empresa privada sin hacer criba ninguna, con lo cual no sabemos si se están sacando restos importantes o no. Además, nos llegan fotos de los vecinos (como la que ilustra este texto) donde se observan restos cerámicos en la superficie».
Por todo lo anterior, Laura Rodríguez denuncia lo que considera «un atropello a nuestro patrimonio». «Es desgarrador. Para la importancia que tiene el yacimiento de Baria, el tratamiento es desgarrador. Es increíble que sigan pasando estas cosas, la falta de preocupación de las instituciones públicas, que no están prestando ninguna colaboración. Pedimos papeles en el Ayuntamiento hace dos semanas, y no nos han contestado aún. Es una vergüenza».
En ese sentido, apunta que de un tiempo a esta parte están apareciendo pintadas «de vecinos de Villaricos descontentos en las mayas de protección del yacimiento, con frases como 'Baria no se vende', 'La historia de un pueblo no se vende' y cosas por el estilo».
