Los hechos ocurrieron en la vivienda familiar sita en la avenida de Madrid de la capital almeriense
ALMERÍA HOY / 05·10·2018
El Juzgado de lo Penal 5 de Almería ha condenado a Daniel A.E.P. español y sin antecedentes, como culpable de un delito de lesiones en el ámbito de la violencia familiar a penas que suman seis meses de multa a razón de tres euros diarios, y a cumplir una orden de alejamiento durante dos meses. Asimismo, se le absuelve de un delito de maltrato agravado.
La sentencia estima como hechos probados que el condenado, sobre las 13.00 horas del pasado 8 de septiembre, estaba en el domicilio familiar ubicado en la avenida de Madrid (Almería) junto a su madre y a su hermano. Se produjo una discusión entre madre e hijo, en el curso de la cual el acusado golpeó a su progenitora en el rostro propinándole un bofetón.
Al intentar evitar la pelea, el otro hermano trató de mediar, pero el acusado volvió a golpearla fuertemente, causándole lesiones en la muñeca que le tuvieron impedida para sus ocupaciones habituales durante cuatro días. Tanto madre como hermano han renunciado a reclamar.
Además, la sentencia se refiere a un informe forense que indica que el condenado padece un trastorno esquizoide de personalidad, pero que «al explorarlo no concurre en él psicopatología que oriente hacia una enfermedad mental que que altere o anule su capacidad de entender», por lo que no se tiene en cuenta ni como eximente ni como atenuante.
La sentencia estima como hechos probados que el condenado, sobre las 13.00 horas del pasado 8 de septiembre, estaba en el domicilio familiar ubicado en la avenida de Madrid (Almería) junto a su madre y a su hermano. Se produjo una discusión entre madre e hijo, en el curso de la cual el acusado golpeó a su progenitora en el rostro propinándole un bofetón.
Al intentar evitar la pelea, el otro hermano trató de mediar, pero el acusado volvió a golpearla fuertemente, causándole lesiones en la muñeca que le tuvieron impedida para sus ocupaciones habituales durante cuatro días. Tanto madre como hermano han renunciado a reclamar.
Además, la sentencia se refiere a un informe forense que indica que el condenado padece un trastorno esquizoide de personalidad, pero que «al explorarlo no concurre en él psicopatología que oriente hacia una enfermedad mental que que altere o anule su capacidad de entender», por lo que no se tiene en cuenta ni como eximente ni como atenuante.
