ALMERÍA HOY / 23·10·2018
El mundo empresarial tributó anoche un homenaje de reconocimiento a Francisco Vargas Viñolo, en el transcurso de un acto que sirvió para recordar sus extraordinarios valores en defensa del asociacionismo empresarial, su compromiso personal e institucional y su entrega en el desarrollo de esta provincia.
En un emotivo acto que contó con la participación del consejero de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía, y reunió a cientos de empresarios, representantes de las distintas administraciones, agricultores, regantes, sindicatos y amigos, el presidente de Asempal, José Cano García, hizo entrega de la insignia de oro de Asempal a Adoración Blanque. Un distintivo especial que el Consejo General de la Confederación acordó conceder a Francisco Vargas, a título póstumo, por su compromiso con el mundo empresarial.
Con la voz entrecortada por la emoción, el presidente de Asempal, recordó la generosidad de Paco Vargas, una figura clave en la agricultura de Almería, que cultivó, sobre todo, el dialogo y el acuerdo como el mejor instrumento de progreso y resaltó su gran ímpetu de trabajo por llevar la voz de los agricultores de Almería a todos los foros.
“Se puso al frente del Consejo Agroalimentario de Asempal y a partir de ahí, desplegó su iniciativa, su coraje y su capacidad emprendedora. Todas las reuniones de Junta Directiva y del Consejo General contaban con su voz, que no era otra que la de los agricultores, haciéndonos partícipes a todos los sectores económicos allí representados, de sus inquietudes y sus demandas”.
Como parte del homenaje, se proyectó un video de algunos momentos significativos de la trayectoria empresarial y humana de Francisco Vargas.
Con gran entereza, su viuda, Adoración Blanque, secretaria general de Asaja Almería agradeció el homenaje y las muestras de cariño: “El mundo empresarial era su vida y la agricultura su pasión; sin embargo quiso ir más allá, quiso además de ser empresario, participar – y de qué manera – en el mundo asociativo empresarial, empezó su andadura en ASAJA y consiguió que hoy día sea un referente a seguir. Con el paso de los años fue participando en los diferentes foros y asociaciones que entendía que podían aportar valor añadido a los empresarios agrarios. En ASEMPAL se sentía en su casa tanto en la Comisión ejecutiva como presidiendo el Consejo Agroalimentario; consideraba que una Asociación fuerte haría crecer y potenciar el tejido empresarial".
En un emotivo acto que contó con la participación del consejero de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía, y reunió a cientos de empresarios, representantes de las distintas administraciones, agricultores, regantes, sindicatos y amigos, el presidente de Asempal, José Cano García, hizo entrega de la insignia de oro de Asempal a Adoración Blanque. Un distintivo especial que el Consejo General de la Confederación acordó conceder a Francisco Vargas, a título póstumo, por su compromiso con el mundo empresarial.
Con la voz entrecortada por la emoción, el presidente de Asempal, recordó la generosidad de Paco Vargas, una figura clave en la agricultura de Almería, que cultivó, sobre todo, el dialogo y el acuerdo como el mejor instrumento de progreso y resaltó su gran ímpetu de trabajo por llevar la voz de los agricultores de Almería a todos los foros.
“Se puso al frente del Consejo Agroalimentario de Asempal y a partir de ahí, desplegó su iniciativa, su coraje y su capacidad emprendedora. Todas las reuniones de Junta Directiva y del Consejo General contaban con su voz, que no era otra que la de los agricultores, haciéndonos partícipes a todos los sectores económicos allí representados, de sus inquietudes y sus demandas”.
Como parte del homenaje, se proyectó un video de algunos momentos significativos de la trayectoria empresarial y humana de Francisco Vargas.
Con gran entereza, su viuda, Adoración Blanque, secretaria general de Asaja Almería agradeció el homenaje y las muestras de cariño: “El mundo empresarial era su vida y la agricultura su pasión; sin embargo quiso ir más allá, quiso además de ser empresario, participar – y de qué manera – en el mundo asociativo empresarial, empezó su andadura en ASAJA y consiguió que hoy día sea un referente a seguir. Con el paso de los años fue participando en los diferentes foros y asociaciones que entendía que podían aportar valor añadido a los empresarios agrarios. En ASEMPAL se sentía en su casa tanto en la Comisión ejecutiva como presidiendo el Consejo Agroalimentario; consideraba que una Asociación fuerte haría crecer y potenciar el tejido empresarial".
