«Antonio Lázaro y Domingo Fernández no han robado dinero del Ayuntamiento»

Entrevista al alcalde de Huércal-Overa




ALMERÍA HOY / 22·10·2018

Domingo Fernández (PP), alcalde de Huércal-Overa, se muestra “tranquilo” ante la querella interpuesta por los ediles de Ciudadanos contra él y su teniente de alcalde, Antonio Lázaro. Les acusan de malversación, prevaricación y fraude, en el caso de Fernández, y de malversación, fraude y tráfico de influencias a Lázaro. Asegura que obró con “todas las bendiciones” de los fedatarios públicos. Además del juicio, está seguro de ganar las próximas elecciones municipales.


- ¿Se le están poniendo feas las cosas en la querella interpuesta por Ciudadanos contra usted y su teniente de alcalde por el presunto pago y cobro indebido respectivamente de 12.000 euros al Grupo municipal del PAL, que entonces lideraba su ahora compañero de filas?

- De momento no hay sentencia ni ha habido juicio. Únicamente existe una denuncia presentada por los dos concejales de Ciudadanos contra el pago que firmé de un dinero que se adeudaba al Grupo que usted dice, que estaba integrado por Antonio Lázaro y Maribel Zurano. Tengo que aclarar que era sólo una parte de esa deuda, pues mi antecesor en el cargo, el socialista Luis García Collado, ya liquidó una parte y ordenó el pago de otra.

- Pero al dejar de existir el PAL y pasar los concejales a tener la condición de no adscritos, dejaron de tener derecho, según los denunciantes, a la gratificación que usted ordenó pagarles.

- Lo que dice la ley es que los concejales que pasan a ser no adscritos no pueden percibir un importe superior al que venían cobrando hasta ese momento, pero no niega a esos ediles el derecho a obtener los mismos ingresos que recibían hasta ese momento.

- Entonces, ¿augura que el caso acabará archivándose?

- Yo sólo puedo decir que Antonio Lázaro y Domingo Fernández no han robado dinero del Ayuntamiento. El mismo día que firmé la orden de pago a su Grupo hice lo mismo con lo que correspondía a los del PSOE y el PP. Los pagos y transferencias que yo firmé no sólo no contaban con ningún reparo, sino que llevaban, además, las firmas del secretario municipal y el interventor. No ha habido ninguna malversación. Estoy muy tranquilo. Todo había sido aprobado por el último pleno que presidió Luis García Collado y contaba con todas las bendiciones de los funcionarios. También es importante que la gente sepa que el dinero fue a la misma cuenta de siempre, en la que figuraba, precisamente, Pepe López, que ahora es uno de los concejales de Ciudadanos que han firmado la querella. Nos quieren acusar de meter la mano y eso es mentira.

- ¿Han entregado a la Guardia Civil la documentación que ha solicitado al Ayuntamiento para la investigación?

- Los funcionarios la están preparando y se la entregarán en cuanto esté preparada.

- Dejando a un lado el asunto de esta querella, el ambiente político en Huércal Overa parece muy calmado.

- No creo que esté tan calmado. En realidad, tampoco sé como debiera estar. Por otra parte, que haya tranquilidad también es bueno.

- ¿Es que, a diferencia de otros pueblos, la oposición y ustedes lavan en casa los trapos sucios en vez de ponerse a caldo?

- Yo no pongo a caldo a nadie.

- ¿Y no le apetece?

- No es cuestión de que me apetezca o no. Simplemente, no tengo motivo para hacerlo. Cada uno hace su trabajo político lo mejor que puede.

- ¿Sabe que sus amigos dicen que usted está convencido de que va a ganar las próximas elecciones municipales?

- Siempre soy positivo. Además, ningún candidato puede decir que va a perder. Ya dirán los resultados quién tiene razón. Todo lo demás son hipótesis.

- ¿Y por qué cree que será usted el que gane y no cualquier otro?

- Porque Huércal Overa está mejor que antes, sobre todo en el aspecto económico. ¿Qué tenemos problemas? Y quién no. Está el asunto de las granjas porcinas y que aún no tenemos el Hospital que queremos y merecemos todos los habitantes del Norte de la provincia. También hace falta seguir mejorando caminos. Son cosas que los vecinos no cesan de pedirnos.

- En ese sentido, le diré que me sorprendió la cordialidad con la que usted invitó hace unos días a que pasara a su despacho un grupo de vecinos que se manifestaban ante el Ayuntamiento contra la instalación de una macrogranja de cerdos junto a sus casas.

- No era la primera vez. Un alcalde tiene que ser sensible a los problemas de los vecinos. Ya les abrí las puertas del ayuntamiento la primera ocasión en que se concentraron los vecinos de Gacía. Examinamos juntos el expediente y les informé sobre los pasos a seguir en el procedimiento administrativo para la apertura de una explotación de las características de la que ha solicitado instalarse en su barriada. Ellos piensan, como los promotores de la granja, que les asiste el derecho y la razón. Yo les entiendo. Todo el mundo conoce o puede imaginar los inconvenientes que proporciona una empresa de ese tipo a quienes viven cerca. Sobre todo el olor.También les aconsejé que, para manifestarse, hay que solicitar permiso a la Subdelegación del Gobierno para evitar problemas.

- Pero esos vecinos ven al alcalde como corresponsable de la situación que se les avecina. Le ven como su adversario y, sin embargo, acuden a usted con una sonrisa de oreja a oreja.

- Para mí no son adversarios. Todavía no hay una licencia concedida y siempre hay que comportarse con educación. Ellos se manifiestan por unas reclamaciones legítimas y yo les atiendo.

- En cualquier caso, le señalan como responsable.

- No me responsabilizan a mi. Ellos se quejan de la norma y del mal que puede producir. Buscan nuestra empatía y solidaridad. En ese sentido, puedo decir que ha crecido una buena relación en el tiempo que llevan reivindicando.

- Y si, finalmente, el Ayuntamiento tiene que otorgar la licencia, ¿se transformará ese amor en odio?

- No cabe duda de que estarán muy cabreados. Pero nosotros no hemos hecho ni votado las normas. Se aplican desde hace muchos años y la Consejería de Agricultura tiene mucho que ver en su aplicación. Es la administración que aprueba el número de cabezas que puede tener la explotación. El Ayuntamiento se limita a otorgar la licencia a la edificación.Es verdad que los purines contaminan y suponen un grave problema por resolver, aunque haya quien pueda pensar que, con la cantidad de granjas que ya existen en la zona, una más se nota menos que en otro lugar.

¿Usted cree que es bueno llenar Huércal Overa de cebaderos porque dan trabajo?

- Es una actividad legal y muchas familias viven de eso en el municipio. No podemos olvidar que gran parte de la riqueza de Huércal Overa proviene del sector porcino. Todos mis vecinos, y mi propia familia, siempre han tenido ‘chinos’ en casa. Algunos hasta 100. Antes suponía un complemento importante para la economía familiar, pero ahora se ha industrializado y masificado su producción. Las explotaciones son mucho más grandes. Estamos hablando de 2.500 e, incluso, 6.000 cerdos al año.

- ¿El problema puede estar en la dimensión? ¿habría que volver a las que había hace 30 ó 40 años?

- Yo creo que la dimensión no cambia nada en el conjunto de Huércal Overa. Pienso que el municipio ya cuenta con muchas granjas. Tendremos que trabajar en una nueva ordenanza y abrir el debate político, porque algunos partidos ya se posicionan contra la apertura de nuevos cebaderos pero, mientras tanto, no nos queda otra alternativa que cumplir la normativa.

- Alcalde, ya sabe que quieren cerrar Radio Actualidad, ¿qué vamos a hacer ahora?

- Radio Actualidad no puede cerrar. Vertebra la comarca y tenemos que cuidarla entre todos porque es necesaria. Es la única emisora que se ocupa de lo que sucede en la comarca y es nuestro derecho a la información, pero parece que a algunos gobernantes sólo les interesa la existencia de medios que puedan manejar a su antojo, y es una pena.

- Radio Actualidad, a la que da cobertura el Ayuntamiento de Huércal Overa, ya ha dicho que usted seguirá amparándola y emitiendo su señal a la comarca por la frecuencia municipal.

- El 105.6, el 107.3... Hay suficiente espectro de frecuencias como para que todo el mundo pueda emitir. Mientras no le encuentren otra frecuencia, está muy bien emitiendo cómo y por dónde lo está haciendo.