Primera victoria de la temporada

Partidazo de Corpas, Chema y Eteki




ALMERÍA HOY / 17·09·2018

La UD Almería logró su primer triunfo en la temporada liguera tras superar al Real Zaragoza por 2-1. El Estadio de los Juegos Mediterráneos volvió a ser testigo de la buena imagen del equipo local, aunque, esta vez, sí pudo festejar que los tres puntos fueran rojiblancos. La fe se tradujo en el nombre de los almerienses y se demostró en las acciones de los goles de la victoria.

A Fran Fernández le sirvió el partido de Copa del Rey para la alineación inicial. El técnico premió la buen actuación de algunos de los futbolistas con su inclusión en la convocatoria y, en especial, con la elección de los pivotes y uno de los centrales. En este sentido, el entrenador comenzó el choque con René; Romera, Saveljich, Juan Ibiza, Andoni; Yan Eteki, César de la Hoz; José Corpas, Luís Rioja, Juan Carlos Real y Álvaro Giménez.
Comenzó el partido y se vio que los locales tenían ganas de que llegara, al fin, el primer triunfo del curso en LaLiga 1|2|3. Eso sí, la imagen de los últimos partidos debía repetirse y era algo que los futbolistas demostrarían desde los instantes iniciales hasta la conclusión.

La primera mitad estuvo más igualada. El Real Zaragoza, que llegaba invicto al Estadio de los Juegos Mediterráneos, gozó de más posesión de pelota en este periodo. De hecho, la única acción destacable la protagonizó un futbolista visitante, puesto que, en el minuto 33, Gual tuvo todo a su favor para adelantar a su equipo, aunque no logró rematar bien y la pelota acabó en las manos de René.

De todos modos el Almería había estado peleando en cada jugada del primer periodo, pero sin oportunidades como para incomodar a Cristian Álvarez. Por ello, el descanso llegó con el marcador inicial (0-0). Tras la reanudación, el cuadro rojiblanco no comenzó expeditivo, lo que derivó en un dominio zaragozano. Sin embargo, ese factor duró 12 minutos, que fue el tiempo que necesitó Luís Rioja para encontrarse solo ante el portero. El extremo local lo hizo todo bien menos el disparo, que le cayó a su pierna mala y Cristian atrapó fácil.

Aunque con esa acción el cancerbero visitante no sintió el peligro del todo, al Almería le sirvió para darse cuenta de que si no dejaba de creer los tres puntos llegarían. Y así fue. En el minuto 65, la fe llegó al cuerpo de Álvaro Giménez, quien presionó a un defensor hasta robarle la posesión y quedarse en un mano a mano con el meta. El portero salió vencedor en el momento de la finalización, pero el cuero rebotó en Grippo y en 1-0 subió al marcador.

De la locura colectiva se pasó a la frialdad. Mientras en el banquillo rojiblanco todavía celebraba la llegada del gol, Lasure subió por su banda y acabó fusilando a René. Era el 1-1. Parecía que la historia se repetía; que la imagen quedaría en nada, pero había un equipo dispuesto a convertir la fe en un triunfo. Los cambios dieron una inyección de moral. Chema se adueñó de la creación de juego y se sumó al dominio del centro del campo que ya tenían Eteki y de la Hoz. Mientras tanto, nadie dejaba de creer ni de correr.

En el minuto 70, una triangulación entre Chema, Corpas y Álvaro Giménez estuvo a punto de acabar en gol, pero el delantero no logró rematar bien delante de Cristian Álvarez. Fue entonces cuando llegó el 2-1. El Real Zaragoza salió en una contra y José Corpas, que estaba en labores defensivas, le robó la pelota. Este inició la jugada hasta que el esférico acabó en los pies de Chema. El canterano espero a que el interior subiera tras su recuperación y le metió el pase entre la zaga para que su chut entrara por la escuadra.

Así llegaba el tanto que confirmaba la primera victoria del equipo que nunca dejó de creer y que cerró una semana espectacular en la que logró el pase a la tercera ronda de la Copa del Rey ganando al Málaga en La Rosaleda y rompía la imbatibilidad del Zaragoza con la consecución de los tres puntos.