Así opina Carmen Flores, presidente de la asociación Defensor del Paciente desde hace 21 años. Un juzgado de instrucción cántabro archiva 145 reclamaciones
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| Carmen Flores, presidenta del Defensor del Paciente (archivo). |
ALMERÍA HOY / 07·07·2018
La presidente de la asociación Defensor del Paciente, Carmen Flores, explica en declaraciones a ALMERÍA HOY que no comprende la «indiferencia» mostrada por administraciones, fiscalía y partidos políticos ante la «estafa colectiva» de 'Idental', y sobre todo, ante presuntas negligencias médicas, como la no esterilización del material con el que se realizaban limpiezas bucales.
En ese sentido, Flores apunta a la posible causa que, a su juicio, explicaría esa «pasividad» institucional ante un «gravísimo asunto» como este. «A lo mejor no lo sabemos nunca, pero tengo claro que en lo de 'Idental' hay algún pez gordo metido —apunta—. Yo lo tengo bastante claro; si no, no hubieran dejado actuar a esta gente así».
Un dato: desde 2015, el Servicio de Consumo del Gobierno de Cantabria ha recibido 145 reclamaciones contra 'Idental', muchas de ellas denunciando mala praxis y retrasos injustificados; en septiembre de 2017, Consumo dio traslado de esas 145 denuncias a la Fiscalía, desde donde se remitieron a Juzgado número 1 de Santander, que ya tramitaba una, y desde donde finalmente se ha acordado el sobreseimiento de todas ellas.
La defensora del paciente recuerda que la mayoría de afectados «son personas con muy poquitos medios», y que «el problema viene de más atrás, de una ley mal hecha y con recovecos». «Hay mucho listo por ahí, y gente que se aprovecha de esos recovecos. Hablo de esta clínica, pero también de otras muchas», asevera Flores.
Por otro lado y ante la falta de información sobre las historias clínicas de los pacientes de 'Idental', traslada que «evidentemente, la justicia tendrá que entrar tarde o temprano a averiguar dónde están esas historias clínicas», y también apunta a «publicidad engañosa» de esta cadena de clínicas dentales.
«Llevo 21 años en El Defensor del Paciente, y nunca he visto tanta apatía, tanta irresponsabilidad (y he visto mucha) y llegado a este punto y lo digo alto y claro: nuestra consciencia tranquila porque estábamos avisando, y ahora hay cientos y cientos de personas en un abandono total por no investigar, por no inspeccionar, por no proteger la salud de las personas, y lo más triste, por no tener en la sanidad publica un servicio de salud bucodental para los más necesitados; bajarían los precios de los privados y no sería un coste extraordinario para la sanidad pública las enfermedades que se derivan de no poderse costear el arreglo de la boca».
En ese sentido, Flores apunta a la posible causa que, a su juicio, explicaría esa «pasividad» institucional ante un «gravísimo asunto» como este. «A lo mejor no lo sabemos nunca, pero tengo claro que en lo de 'Idental' hay algún pez gordo metido —apunta—. Yo lo tengo bastante claro; si no, no hubieran dejado actuar a esta gente así».
Un dato: desde 2015, el Servicio de Consumo del Gobierno de Cantabria ha recibido 145 reclamaciones contra 'Idental', muchas de ellas denunciando mala praxis y retrasos injustificados; en septiembre de 2017, Consumo dio traslado de esas 145 denuncias a la Fiscalía, desde donde se remitieron a Juzgado número 1 de Santander, que ya tramitaba una, y desde donde finalmente se ha acordado el sobreseimiento de todas ellas.
La defensora del paciente recuerda que la mayoría de afectados «son personas con muy poquitos medios», y que «el problema viene de más atrás, de una ley mal hecha y con recovecos». «Hay mucho listo por ahí, y gente que se aprovecha de esos recovecos. Hablo de esta clínica, pero también de otras muchas», asevera Flores.
Por otro lado y ante la falta de información sobre las historias clínicas de los pacientes de 'Idental', traslada que «evidentemente, la justicia tendrá que entrar tarde o temprano a averiguar dónde están esas historias clínicas», y también apunta a «publicidad engañosa» de esta cadena de clínicas dentales.
«Llevo 21 años en El Defensor del Paciente, y nunca he visto tanta apatía, tanta irresponsabilidad (y he visto mucha) y llegado a este punto y lo digo alto y claro: nuestra consciencia tranquila porque estábamos avisando, y ahora hay cientos y cientos de personas en un abandono total por no investigar, por no inspeccionar, por no proteger la salud de las personas, y lo más triste, por no tener en la sanidad publica un servicio de salud bucodental para los más necesitados; bajarían los precios de los privados y no sería un coste extraordinario para la sanidad pública las enfermedades que se derivan de no poderse costear el arreglo de la boca».
