«El Poniente tiene un gran problema ambiental: las plantas de residuos agrícolas que se incendian cada dos por tres»

Enrique Ruiz, coordinador provincial de Ecologistas en Acción: «Las administraciones tienen que ponerse las pilas, está claro que hace falta mejorar en gestión, las empresas concesionarias no lo están haciendo bien»


Imagen del incendio declarado en Ejido Medio Ambiente el pasado año (COAG).

ALMERÍA HOY / 20·07·2018

Mucho se está hablando de un tiempo a esta parte sobre los planes para recuperar el acuífero del Poniente almeriense, unos planes que pasan por la reducción de las extracciones de agua, hasta 2021, de 50 hectómetros cúbicos.

Hemos preguntado al coordinador provincial de Ecologistas en Acción, Enrique Ruiz, su opinión al respecto, y esto es lo que ha contestado: "Lo que ha pasado en el Poniente es el modelo de agricultura intensiva, que ha podido ser positivo económicamente, pero que en gestión ambiental siempre ha estado a la cola".

Para el colectivo verde, "durante muchos años se ha permitido el incremento de hectáreas dedicadas a la agricultura intensiva, y el tema del agua no se ha hecho bien, de hecho los agricultores ahora están haciendo las cosas como tenían que haberse hecho hace 15 años, llegan tarde, pero son positivas".

Pero no es el único motivo que sitúa a la comarca, en opinión del coordinador provincial de Ecologistas en Acción, "a la cola en gestión ambiental". En ese sentido apunta que "el Poniente tiene un verdadero problema ambiental: las plantas de residuos se incendian cada dos por tres", en clara referencia a lo ocurrido estos últimos años en La Mojonera y en El Ejido.

"La gestión de las plantas de restos vegetale deja mucho que desear, cada dos por tres vemos cómo se incendian, cómo no se da una salida adecuada a los residuos. Las administraciones tienen que ponerse las pilas, está claro que hace falta mejorar en gestión, las empresas concesionarias no lo están haciendo bien, y los agricultores que quieren depositar sus restos allí ven que a los pocos días se queman, y se preguntan para qué van a ir a pagar. Luego, hay casos aislados que los arrojan al campo, pero la mayoría agricultores sí acuden a las plantas, el problema es la gestión de esas plantas".