Las pesadillas no dejan dormir al niño herido en el parque acuático de Roquetas

Los padres acuden a un psicólogo para ayudarle a conciliar el sueño de noche, misión más que difícil desde que ocurriera el accidente


Así ha quedado la nalga del niño herido en Roquetas.

ALMERÍA HOY / 20·06·2018

José Manuel Ibáñez es el padre del niño de 9 años que el pasado fin de semana quedó atrapado en el sistema de succión de una piscina del 'Mario Park', en Roquetas de Mar, y ha contado a ALMERÍA HOY que se han visto obligados a llamar a un psicólogo para que les ayude con las pesadillas que, según cuenta, viene padeciendo el menor desde que ocurriera el accidente.

«El niño tiene pesadillas por las noches desde entonces, y va un psicólogo a verlo para ver si necesita algún tratamiento», explica José Manuel antes de confirmar que ha denunciado al parque acuático por la «falta de seguridad» en las instalaciones, algo que, a su juicio, ha quedado «demostrado» con este incidente.

«Estábamos pasando el día allí en familia cuando escucho a mi hijo gritar. Estaba en uno de los tubos, me acerco corriendo y veo que algo le está succionando. Me tiro al agua y por más que tiro de mi niño no puedo sacarlo. Entonces me doy cuenta de que hay que apagar los motores para poder sacarlo», relata subrayando el hecho de que estuvo «entre ocho y diez minutos agarrando a mi hijo para que no se lo tragara la tubería». Una vez liberado, fue trasladado a un centro médico.

«Diez minutos es mucho tiempo para apagar el motor», lamenta este padre almeriense detallando que, desde entonces, además de las secuelas psicológicas, el pequeño toma calmantes para paliar el dolor y sigue con suero intravenoso.

Así las cosas, Juan Manuel Ibáñez ya ha interpuesto una denuncia en los juzgados para exigir responsabilidades por lo ocurrido. «No hay seguridad ninguna. Saqué al niño del agua, se me quedó inconsciente, lo tuve que subir yo mismo como pude, que estaba ya agotado de tirar de él con todas mis fuerzas, pero nadie me esperaba, lo tuve que llevar yo a la enfermería», protesta.