El SAS tendrá que indemnizar a una parturienta que sufrió «dolor agudo» durante horas y cuyo bebé nació en parada cardiorespiratoria

La menor que nació en 2006 padece ahora un grado de discapacidad del 65%. La sentencia remarca que debió practicarse una cesárea y no un parto




ALMERÍA HOY / 27·06·2018

Una sentencia del TSJA consultada por ALMERÍA HOY condena al Servicio Andaluz de Salud (SAS) a indemnizar con 250.000 euros a una mujer que padeció «horas de sufrimiento fetal y crónico» durante un parto en el Hospital de Torrecárdenas, y cuyo bebé nació en parada cardiorespiratoria; una hija que actualmente tiene una discapacidad del 65%.

La sentencia expone la «mala práxis» y la «concatenación de negligencias» que se produjeron en aquel parto, estimando que hay relación directa entre la asistencia de control de Bienestar Fetal anteparto y parto, y las lesiones y secuelas tanto físicas, psíquicas como sensoriales que padece desde su nacimiento.

«Hubo mala Praxis, no cumpliendo la Lex Artis ad Hoc en la consulta obstétrica de Consulta de Bienestar Fetal al no realizar las exploraciones adecuadas seriadas sistemáticas y protocolizadas, y escritas para su puesta en práctica tanto en la Historia Clínica a imprenta de la mencionada consulta y por ende no realizar el Protocolo estipulado por la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia a fin de detectar feto en peligro
y evitar un daño irreversible. Hubo mala Praxis, no cumpliendo la Lex Artis ad Hoc al no realizar las exploraciones adecuadas seriadas
y sistemáticas, protocolizadas, en el Servicio de Obstetricia, a su ingreso hospitalario por Servicio de Urgencias y por ende no realizar el Protocolo estipulado en la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia a fin de detectar feto en peligro y evitar un daño irreversible».

También expone que «hubo mala praxis, no cumpliendo la Lex Artis ad Hoc pues no se realizó lo más urgente y perentorio decisivo, determinante, como es solicitar un Test estresante o prueba de tolerancia a las contracciones, también llamado Prueba de Pose: a) desde la consulta de Bienestar fetal y/o b) continuar con la mencionada prueba de POSE tras el registro de monitorización iniciado a las 12.40 horas, a fin de detectar feto en peligro y evitar un daño irreversible».

«Hubo mala praxis, no cumpliendo la Lex Artis ad Hoc al no realizar la mínima expresión exploratoria de una gestante, y ya a término de 40 semanas más 2 días, como es un tacto vaginal para observar el estado del cuello de útero: longitud, dilatación, dureza y posición. Posición y situación fetal y estado de las membranas amnióticas, así como Líquido amniótico. Hubo mala praxis, no cumpliendo la Lex Artis ad Hoc al no continuar con la vigilancia sistematizada y seriada, ya mencionada, incluyendo la valoración del estado de bienestar fetal en cuanto a su equilibrio acidobase. Hubo error en la interpretación del registro de monitorización de la 12,40 horas al dar el resultado como
feto reactivo. Como resultado de lo anterior se debió haber practicado una cesárea tras éste anterior registro mencionado habiendo incluido una prueba de POSE en turno de mañana. Tal como se desarrollaron los hechos, aún así, remitiéndola a planta, tras la monitorización iniciada a las
12.40, hubo Mala Praxis por Negligencia, no explorando a la paciente: con Exploración vaginal, Amnioscopia y Ecografía y Doopler. Lo mínimo es la exploración manual vaginal y que en este caso sólo lo hizo la matrona. Tal como exploró la matrona en un cuello con dilatación de permeable dos dedos. Existe una Negligencia el mantener a la gestante monitorizada durante 31 minutos con registro de trazado patológico, manteniéndolo durante esos 31 minutos no tomando, de forma imprudente, medidas urgentes tras los primeros minutos». Son sólo algunas de las negligencias que señala la sentencia.