María López Cervantes: «Queremos llevar al próximo Pleno las condiciones de licitación del ciclo integral del agua»

Entrevista a María Antonia López, alcaldesa de Garrucha


María López (PSOE), alcaldesa de Garrucha.

ALMERÍA HOY / 11·02·2018

Garrucha está ya más fuera que dentro de Galasa, del Consorcio de Residuos Almanzora-Levante-Los Vélez y del servicio de recaudación de Diputación. Así lo afirma la alcaldesa que, además, quiere tranquilizar a los vecinos sobre la construcción de 2.000 viviendas en una zona inundable en la 1.1 y anuncia unos presupuestos que ascienden a 7,7 millones que le permitirán invertir 800.000 y ahorrar 1,3.

P. Es conocida su voluntad de abandonar Galasa, pero otro alcalde de su partido que anunció su intención de hacerlo dice ahora que, como el motivo para salir es que no acepta los nuevos estatutos y, como aún no han sido publicados y, por tanto, no han entrado en vigor, no saldrá, de momento, de la sociedad pública provincial, ¿es ese también el caso de Garrucha?


R. Cristóbal [García Granados] habla por el municipio de Arboleas. Ese no es el caso de Garrucha. Nosotros tomamos hace tiempo la decisión de asumir la gestión del ciclo integral del agua y abandonar Galasa. Fue ratificada en el Pleno y, por tanto, para mí es irrevocable. No hay marcha atrás. De hecho, queremos llevar las condiciones de la licitación del servicio del ciclo integral del agua al próximo Pleno para su debate y aprobación.

Entonces están ya más fuera que dentro.

Así es. Esa es nuestra intención. Si no somos capaces de tener el expediente concluido para el día 25 [de enero], convocaremos una sesión extraordinaria en cuanto tengamos preparado el pliego de condiciones. Es nuestra voluntad y nos urge. Vamos a asumir la gestión con independencia de lo que haga Galasa.

¿Por qué esa urgencia?

Entendemos que esa gestión se puede mejorar muchísimo y, además, se trata de un importante recurso económico para cualquier ayuntamiento. No entendemos los resultados que aporta Galasa, con unas pérdidas tan grandes. Ninguno de los estudios económicos de que disponemos justifica números tan nefastos como los que arroja esa empresa pública provincial. El déficit de Galasa sólo se entiende desde una pésima gestión, y nosotros no podemos mantener a Garrucha atada a esa losa. Seguiremos adelante con el procedimiento para implementar la gestión directa del servicio de abastecimiento de agua en nuestro pueblo.

¿Y será rentable después de pagar los cinco millones de indemnización que le pedirá Galasa?

Eso está por ver. Primero tendrán que aclarar sus cuentas, que están tan embarulladas que cada día ofrecen un balance diferente. Tendrán que restar a la deuda el activo de la empresa y, además, tenemos el ejemplo de Vera, que salió hace diez años y la justicia acabó dictaminando que no tiene que indemnizarle nada.

Ahora que nombra a Vera, ¿es Codeur la empresa que sustituirá a Galasa? Se da por hecho.

Mire, aquí no se puede dar por hecho nada. El servicio saldrá a concurso público y se adjudicará a quien mejores prestaciones ofrezca a Garrucha. Lo tengo claro.

¿Abandonarán también el Consorcio de recogida de residuos urbanos?

No le quepa duda. Aunque este procedimiento está algo más retrasado porque lo iniciamos después. Estamos cumplimentando los requisitos que conlleva el proceso. Hemos solicitado a cinco operadores del servicio la estructura de costes y, en breve, lo sacaremos también a licitación. Sin embargo, el pliego de condiciones técnicas para adjudicar el del agua está prácticamente listo.

En otro orden de cosas, ustedes ya han aprobado inicialmente el Plan General de Ordenación Urbana.

Efectivamente. Está en periodo de exposición pública y, una vez termine ese trámite, se adjuntarán los informes de otras administraciones y quedará aprobado.

Sin embargo, el Observatorio Ciudadano Municipal de Vera presentó unas alegaciones al informe de Medio Ambiente que califica como ‘no inundables’ los terrenos del Sector 2, la parcela donde esta la 1.1, y aún no les han respondido, ¿cómo se puede entender eso y que se vayan a poder construir 2.000 viviendas en un suelo que toda la comarca ha visto inundado?

Desconozco lo que me dice acerca de esas alegaciones, pero puedo asegurarle que existe la previsión de construir unas infraestructuras de drenaje y pluviales en esos terrenos que tienen que estar ejecutadas antes de que se urbanice el sector. También tendrán que disponer otras infraestructuras, como los accesos, incluyendo una nueva rotonda.

Pero, desgraciadamente, estamos acostumbrados a que algunas de esas obras no se hagan. Valga el ejemplo de la desaladora de Villaricos, que se la llevó la rambla porque no se construyeron infraestructuras que la defendieran.

Entiendo que los vecinos se preocupen, pero en la mayoría de los casos, y en Garrucha siempre, se exige el cumplimiento de las obligaciones a los agentes urbanísticos antes del desarrollo de sus actuaciones. Nosotros lucharemos para que esas infraestructuras tan necesarias estén hechas y, en caso contrario, no podrán desarrollar el sector. Yo, como alcaldesa, no firmaré una licencia de obras si no están hechos los accesos, la red de evacuación de pluviales y las infraestructuras que requiere esa parcela para impedir las inundaciones, así como todos los servicios y equipamientos que exige la normativa vigente. No hay más cáscaras.

Ya ha empezado el año, pero aún no han aprobado los presupuestos.

Los tenemos ultimados y se debatirán en los próximos días. El de ingresos asciende a 7.668.080 euros, lo que supone un millón más que en el ejercicio anterior, y el de gastos alcanza a 6.384.773, 900.000 más que en 2017. Hay previsto un superávit de 1,3 millones.

¿Cuánto piensan destinar a inversiones?

810.000 euros.

¿En qué se los van a gastar?


El proyecto que más ilusión nos hace es que, durante 2018, haremos realidad la rotonda de La Simona, una vieja aspiración de todos los garrucheros. Hemos modificado el proyecto inicial para dar acceso desde la misma glorieta al Polígono Industrial, con lo que nos ahorraremos la construcción prevista de un paso elevado. Ya está el expediente en manos de la Junta y en proceso de exposición pública. Los técnicos han subsanado las deficiencias observadas y podremos licitar y ejecutar la obra durante este ejercicio.

¿A cuánto asciende el presupuesto de esta obra?

Supera un poco el millón de euros, pero la mayor parte corre a cuenta de los propietarios de los sectores urbanísticos a los que da acceso la rotonda. El Ayuntamiento contribuye, en principio, con 240.000 euros, de los que habrá que descontar la presumible rebaja que tendrá lugar en la licitación, que podría propiciar que el municipio tuviera que aportar muy poco dinero.

¿Qué otras inversiones cabría destacar?

Queremos emprender algunas mejoras en el Malecón Para eso hemos destinado 120.000 euros. Son muchos metros de Paseo. Se trata de renovar las luminarias y reponer el mobiliario urbano que lo necesite, como bancos, papeleras y demás, así como los tramos de pavimento más deteriorados.

¿Cuenta con financiación externa para estas obras?

- Hemos solicitado fondos europeos destinados al ahorro de energía. Creo que lo conseguiremos, pero acometeremos la actuación con independencia de eso y, por ello, hemos previsto la partida correspondiente. Si nos encontramos la subvención, mucho mejor. No hay que olvidar que el Paseo del Malecón tiene cerca de 40 años. Nos gusta como es, un referente de Garrucha y de toda la comarca, y queremos mantenerlo para poder seguir disfrutándolo y mostrándolo con orgullo a todos nuestros visitantes. No podemos abandonarlo. Sería algo imperdonable para cualquier corporación que sienta a Garrucha.

Oiga, ¿qué pasa con la playa prometida por la APPA como compensación al tramo de baño perdido con la ampliación del puerto? ¿Están dispuestos a exigírsela?

La hemos exigido y seguimos haciéndolo. Paralelamente a los trámites que estamos realizando con el Ministerio de Fomento para la ampliación del Paseo Marítimo, que ya está trabajando en actualizar el proyecto existente y va cumpliendo puntualmente el cronograma fijado, venimos manteniendo reuniones con la Junta para que la playa que nos debe sea una realidad. Es verdad que las gestiones llevan unos meses paralizadas por el relevo al frente de la Autoridad Portuaria, pero tengo fijada una cita este mismo mes con la nueva directora para retomar el asunto. No nos vamos a conformar con que echen unos camiones de arena sobre las piedras. Queremos, también, un espigón que la proteja y la mantenga. Que todo el mundo sepa que no se nos olvida la playa prometida.