Además de los vertidos de aguas residuales en el Bajo Andarax, también se producen en otros lugares del Poniente y la capital
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| Aguas residuales en la desembocadura del río Adra (archivo). |
ALMERÍA HOY / 09·02·2018
Los vertidos de aguas residuales siguen existiendo en múltiples puntos de la provincia. Si hace días este medio publicaba en exclusiva vertidos en el río Andarax —a pesar de que, desde junio de 2016, se supone que no existen—, este viernes nos centramos en el Poniente almeriense, donde, a día de la fecha, también se vierte al mar y al cauce del río Adra, entre otros.
Empezando por Roquetas de Mar, han sido varias las denuncias públicas realizadas en los últimos tiempos por IU, un partido que, precisamente, ha preguntado a principios de enero y por escrito al Ayuntamiento roquetero acerca de las aguas residuales en La Cañada Real de la Costa-Rambla del Pastor-Playa de Los Bajos; unos vertidos que vendrían a sumarse a los denunciados el año pasado en la zona de La Romanilla, en un solar de Playa Serena o en la mismísima playa de Aguadulce. En cualquier caso, desde IU explican a este medio que esperan una respuesta del Ayuntamiento durante el próximo pleno.
En El Ejido, colectivos ecologistas señalan vertidos de aguas residuales en la zona de Almerimar —así lo constata el informe de 'Banderas Negras' de Ecologistas en Acción—, mientras que en Adra, el mismo documento denuncia la existencia, desde hace años, de «vertidos incontrolados de todo tipo» en el puerto abderitano y junto a la desembocadura del río Adra.
Eso, en lo que respecta al Poniente almeriense; en la capital, hay vertidos en la mismísima Rambla Federico García Lorca o en Costacabana, mientras que también existen, a la espera de la nueva EDAR, vertidos de aguas residuales en Campohermoso (Níjar). Y si nos vamos más hacia el Levante, todavía está relativamente reciente la alarma generada en 2015 en playas de Cuevas y de Vera por la proliferación de microalgas tóxicas, si bien la Junta siempre ha negado que esté relacionadas con vertidos cuya existencia sí admite.
Empezando por Roquetas de Mar, han sido varias las denuncias públicas realizadas en los últimos tiempos por IU, un partido que, precisamente, ha preguntado a principios de enero y por escrito al Ayuntamiento roquetero acerca de las aguas residuales en La Cañada Real de la Costa-Rambla del Pastor-Playa de Los Bajos; unos vertidos que vendrían a sumarse a los denunciados el año pasado en la zona de La Romanilla, en un solar de Playa Serena o en la mismísima playa de Aguadulce. En cualquier caso, desde IU explican a este medio que esperan una respuesta del Ayuntamiento durante el próximo pleno.
En El Ejido, colectivos ecologistas señalan vertidos de aguas residuales en la zona de Almerimar —así lo constata el informe de 'Banderas Negras' de Ecologistas en Acción—, mientras que en Adra, el mismo documento denuncia la existencia, desde hace años, de «vertidos incontrolados de todo tipo» en el puerto abderitano y junto a la desembocadura del río Adra.
Eso, en lo que respecta al Poniente almeriense; en la capital, hay vertidos en la mismísima Rambla Federico García Lorca o en Costacabana, mientras que también existen, a la espera de la nueva EDAR, vertidos de aguas residuales en Campohermoso (Níjar). Y si nos vamos más hacia el Levante, todavía está relativamente reciente la alarma generada en 2015 en playas de Cuevas y de Vera por la proliferación de microalgas tóxicas, si bien la Junta siempre ha negado que esté relacionadas con vertidos cuya existencia sí admite.
