Ecologistas en Acción advierte de la «situación extrema» del río almeriense, considerado uno de los más sobrexplotados del continente
ALMERÍA HOY / 24·01·2018
La «extrema» situación del acuífero Aguas, en Los Filabres, es —junto al Algarrobico— la mayor preocupación para Ecologistas en Acción de la provincia de Almería. Y es que, según explica a este medio su coordinador provincial, Marcos Diéguez, «si seguimos así, al manantial del acuífero Aguas le quedan cinco o seis años de vida como mucho».
El grupo ecologista lamenta así la «pérdida» de un «auténtico oasis en la zona más árida de Europa». «Es un ecosistema absolutamente singular, único en el continente europeo, y va a desaparecer si no hacemos algo ya», afirma Diéguez, quien admite que la solución «es complicada». «Los políticos tienen que ser valientes. Hay que reducir drásticamente permisos de extracción, a parte de que hay mucho 'ilegal'. Las concesiones son desmesuradas para la capacidad de recarga del manantial».
El coordinador de Ecologistas en Acción pone un ejemplo. Según traslada, una de esas concesiones se otorgó a una finca de dos hectáreas con derecho a extraer 62.000 metros cúbicos de agua. «Eso es una bestialidad; da para plantar arroz en el desierto si se quiere», sostiene Marcos Diéguez, quien recuerda que, a un invernadero, normalmente le corresponden 7.000 metros cúbicos de agua.
La administración responsable, recuerda, es la Junta de Andalucía, a la que, además de controlar las concesiones, le pide que «investigue y sancione», y que «vigile la proliferación de cultivos de olivos» en el Campo de Tabernas.
El grupo ecologista lamenta así la «pérdida» de un «auténtico oasis en la zona más árida de Europa». «Es un ecosistema absolutamente singular, único en el continente europeo, y va a desaparecer si no hacemos algo ya», afirma Diéguez, quien admite que la solución «es complicada». «Los políticos tienen que ser valientes. Hay que reducir drásticamente permisos de extracción, a parte de que hay mucho 'ilegal'. Las concesiones son desmesuradas para la capacidad de recarga del manantial».
El coordinador de Ecologistas en Acción pone un ejemplo. Según traslada, una de esas concesiones se otorgó a una finca de dos hectáreas con derecho a extraer 62.000 metros cúbicos de agua. «Eso es una bestialidad; da para plantar arroz en el desierto si se quiere», sostiene Marcos Diéguez, quien recuerda que, a un invernadero, normalmente le corresponden 7.000 metros cúbicos de agua.
La administración responsable, recuerda, es la Junta de Andalucía, a la que, además de controlar las concesiones, le pide que «investigue y sancione», y que «vigile la proliferación de cultivos de olivos» en el Campo de Tabernas.
