A Francisco Torrecillas (CILUS, alcalde de Albox) no le han aprobado los presupuestos, pero dice que le «da igual». «Seguiré con los de este año prorrogados, como hizo el PSOE con mayoría absoluta en dos ocasiones y el PP un montón de veces»
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| Francisco Torrecillas, alcalde de Albox (archivo). |
ALMERÍA HOY / 26·12·2017
El pasado 21 de diciembre, los quince concejales de la oposición dejaron sobre la mesa, sin debatir ni tan siquiera votar, los presupuestos elaborados por el alcalde de Albox, Francisco Torrecillas (CILUS), que se mantiene en el cargo apoyado por un concejal exsocialista.
«PP y PSOE están ya de campaña electoral y llevaron al pleno sus programas para las municipales de 2019. Al portavoz popular no le encaja que hayamos ahorrado este año 800.000 euros, mientras que el PSOE ha salido en estampida del gobierno y todo le parece mal, hasta el punto de oponerse a unos presupuestos que son exactamente igual a los que hizo Carrillo (PSOE) para 2017, sólo que con más inversiones», asegura el alcalde.
«De todos modos —prosigue— me da igual que los aprueben o no. Campoy [el único concejal que le acompaña en el gobierno municipal] y yo seguiremos trabajando e invirtiendo 2,2 millones de euros en el pueblo. Para lo único que nos condiciona no tener presupuesto aprobado es a la hora de pedir un préstamo, pero no nos lo iban a dar».
El alcalde lamenta el estado «ruinoso» en que se encontró el Ayuntamiento. «PP y PSOE dejaron una deuda de 18 millones de euros, de la que este año hemos amortizado 800.000 y el que viene 900.000. Aún así, tendremos 2,2 millones, de un presupuesto de 7,9, para invertir. 250.000 saldrán del dinero que se llevaban en concepto de sueldos los cinco ediles socialistas que se han marchado».
Frente a las acusaciones vertidas por el portavoz socialista de que se negó a negociar los presupuestos y les emplazó a hacerlo en privado, llegando a marcharse de la comisión informativa antes de escuchar sus propuestas, Torrecillas admitió que tuvo que irse «a inaugurar la remodelación de la Plaza de los Alfareros, acto al que, por cierto, no acudió ninguno de los concejales de la oposición».
«Y es que, quien nunca fue cosa y cosa se hace, ¡ay Jesús! ¡qué cosas hace!», aseveró aludiendo a Carrillo. «Los presupuestos se tienen que negociar en privado y, después, se hacen públicos los acuerdos, pero no en una comisión informativa».
En cuanto a las aportaciones de la oposición, Torrecillas se limitó a repetir que «era el programa electoral de cada partido. El PP propuso asfaltar todos los caminos y ayudar a todas las familias necesitadas de Albox, pero no dijo de dónde teníamos que sacar el dinero, y los socialistas dijeron de poner 100.000 euros para ayudas sociales, cuando el año anterior habían dispuesto 55.000».
«Además —concluía el alcalde—, amenazaron con aprobar ellos los presupuestos, demostrando no tener ni idea, ellos y sus asesores, sobre cómo funcionan los ayuntamientos. El presupuesto es una potestad del alcalde. Se pueden aprobar o rechazar, pero nada más».
«PP y PSOE están ya de campaña electoral y llevaron al pleno sus programas para las municipales de 2019. Al portavoz popular no le encaja que hayamos ahorrado este año 800.000 euros, mientras que el PSOE ha salido en estampida del gobierno y todo le parece mal, hasta el punto de oponerse a unos presupuestos que son exactamente igual a los que hizo Carrillo (PSOE) para 2017, sólo que con más inversiones», asegura el alcalde.
«De todos modos —prosigue— me da igual que los aprueben o no. Campoy [el único concejal que le acompaña en el gobierno municipal] y yo seguiremos trabajando e invirtiendo 2,2 millones de euros en el pueblo. Para lo único que nos condiciona no tener presupuesto aprobado es a la hora de pedir un préstamo, pero no nos lo iban a dar».
El alcalde lamenta el estado «ruinoso» en que se encontró el Ayuntamiento. «PP y PSOE dejaron una deuda de 18 millones de euros, de la que este año hemos amortizado 800.000 y el que viene 900.000. Aún así, tendremos 2,2 millones, de un presupuesto de 7,9, para invertir. 250.000 saldrán del dinero que se llevaban en concepto de sueldos los cinco ediles socialistas que se han marchado».
Frente a las acusaciones vertidas por el portavoz socialista de que se negó a negociar los presupuestos y les emplazó a hacerlo en privado, llegando a marcharse de la comisión informativa antes de escuchar sus propuestas, Torrecillas admitió que tuvo que irse «a inaugurar la remodelación de la Plaza de los Alfareros, acto al que, por cierto, no acudió ninguno de los concejales de la oposición».
«Y es que, quien nunca fue cosa y cosa se hace, ¡ay Jesús! ¡qué cosas hace!», aseveró aludiendo a Carrillo. «Los presupuestos se tienen que negociar en privado y, después, se hacen públicos los acuerdos, pero no en una comisión informativa».
En cuanto a las aportaciones de la oposición, Torrecillas se limitó a repetir que «era el programa electoral de cada partido. El PP propuso asfaltar todos los caminos y ayudar a todas las familias necesitadas de Albox, pero no dijo de dónde teníamos que sacar el dinero, y los socialistas dijeron de poner 100.000 euros para ayudas sociales, cuando el año anterior habían dispuesto 55.000».
«Además —concluía el alcalde—, amenazaron con aprobar ellos los presupuestos, demostrando no tener ni idea, ellos y sus asesores, sobre cómo funcionan los ayuntamientos. El presupuesto es una potestad del alcalde. Se pueden aprobar o rechazar, pero nada más».
