La manifestación, convocada por 'Acuíferos Vivos' y 'Plataforma en defensa del acuífero del río Aguas', se ha desarrollado en Puerta de Purchena
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| Imagen de la protesta en Puerta de Purchena. // Acción por Almería. |
ALMERÍA HOY / 04·11·2017
Cientos de almerienses han acudido este sábado a la manifestación celebrada en la Puerta de Purchena bajo el lema «Nos roban el agua» y convocada por los colectivos 'Acuíferos Vivos' y 'Plataforma en defensa del acuífero del río Aguas'.
El éxito de este acto de protesta se ha debido en gran medida a la difusión en redes sociales, donde los grupos convocantes han denunciado que «poderosos grupos inversores, en connivencia con las Administraciones, han plantado millones de olivos en regadío en pleno desierto de Tabernas», y que «estos monocultivos superintensivos son regados con aguas fósiles extraídas del Acuífero Aguas, el más sobre-explotado de toda Andalucía (400%), y del que depende el Río Aguas, uno de los pocos recursos hídricos de la provincia, completamente desertificada».
Además, según señalan, dicha situación «ya está originando problemas de abastecimiento en los núcleos urbanos y aldeas de la zona». «Todos los estudios coinciden en que el río se secará completamente en los próximos años, sentenciando a muerte a la flora y la fauna, muchas de ellas especies endémicas, poniendo en peligro los modos de vida sostenibles de la comarca, condenando a sus 35.000 habitantes a la migración precaria y acabando con el Paraje Natural Karst en Yesos de Sorbas», añaden.
El éxito de este acto de protesta se ha debido en gran medida a la difusión en redes sociales, donde los grupos convocantes han denunciado que «poderosos grupos inversores, en connivencia con las Administraciones, han plantado millones de olivos en regadío en pleno desierto de Tabernas», y que «estos monocultivos superintensivos son regados con aguas fósiles extraídas del Acuífero Aguas, el más sobre-explotado de toda Andalucía (400%), y del que depende el Río Aguas, uno de los pocos recursos hídricos de la provincia, completamente desertificada».
Además, según señalan, dicha situación «ya está originando problemas de abastecimiento en los núcleos urbanos y aldeas de la zona». «Todos los estudios coinciden en que el río se secará completamente en los próximos años, sentenciando a muerte a la flora y la fauna, muchas de ellas especies endémicas, poniendo en peligro los modos de vida sostenibles de la comarca, condenando a sus 35.000 habitantes a la migración precaria y acabando con el Paraje Natural Karst en Yesos de Sorbas», añaden.
