La variante de Roquetas abre a finales de mes, once años después de empezar las obras

Favorecerá principalmente a Roquetas, Vícar y La Mojonera, así como a cualquiera que se desplace hacia el Poniente desde la capital




ALMERÍA HOY / 07·09·2017

Roquetas de Mar cuenta los días para disfrutar de su variante después de años de retrasos —llevan 11 años en obras para algo más de siete kilómetros—. Según la Junta de Andalucía, es este mes de septiembre cuando esta vía rápida quedará abierta completamente, dando servicio a unos 150.000 usuarios. Y es que no sólo los roqueteros esperan la inauguración oficial de la variante; con un presupuestp superior a 43,3 millones de euros, canaliza un alto volumen de tráfico de 35.000 vehículos al día, y favorece a una población de 150.000 habitantes de los términos municipales de Aguadulce, Vícar, El Parador de la Hortichuelas, Roquetas de Mar y La Mojonera.

Así, la propia presidenta andaluza, Susana Díaz, visitaba la localidad roquetera a mediados de julio para inaugurar el último tramo que ha entrado en funcionamiento, esto es, el que va desde el polígono industrial roquetero hasta la carretera de La Mojonera. En dicha visita, Díaz calificó la variante de «infraestructura de primer nivel y una potente inversión fruto de la colaboración institucional». De hecho, el propio Ayuntamiento roquetero tuvo que hacerse cargo de las expropiaciones tras los problemas de liquidez del Gobierno andaluz.

«Era una demanda del tejido turístico potente de esta zona, ya que los touroperadores nos trasladaban que no era posible que se tardará más en acceder a las playas de la comarca del Poniente que, en algunos casos, lo que tardaban en llegar los turistas de otros lugares de Europa a Almería y también del sector agroalimentario, ya que los 35.000 vehículos que transitan a diario se multiplican coincidiendo con las campañas agrícolas», ha trasladado.

La presidenta andaluza destacaba entonces que la de la variante de Roquetas ha sido una «inversión difícil en una coyuntura económica compleja» y recordaba que, cuando en 2006 comenzaron las obras, la inversión de 58 millones de euros coincidió «con los años más virulentos de la crisis económica» hasta el punto de que se ha tenido que dividir en fases.