Un profesor del Levante almeriense acepta cinco años y medio de prisión por abusar de alumnos y grabar vídeos sexuales

El hombre, que deberá indemnizar a los alumnos con 31.000 euros y que ha sido inhabilitado como docente por otros cinco años y medio, daba clases de matemáticas


Audiencia Provincial de Almería.

EUROPA PRESS / 11·01·2017

J.J.G.G., el profesor acusado de tomar fotografías y vídeos de carácter pornográfico a varios de sus alumnos a los que también se insinuaba y pedía favores de índole sexual, de forma que llegó a abusar de alguno de ellos, ha aceptado cinco años y medio de prisión tras el acuerdo alcanzado entre las partes.

En concreto, el docente que impartía clases particulares en su vivienda de un municipio del Levante almeriense, ha sido condenado a dos años y medio por un delito continuado de abusos sexuales a una alumna y a tres años por seis delitos contra la integridad moral, esto es, seis meses por cada uno de ellos.

Según han informado fuentes jurídicas, el acusado ha aceptado el acuerdo alcanzado por la Fiscalía y la acusación particular ejercida por el letrado Abraham de la Vega, con lo que se le ha retirado el delito de eliminación de material pornográfico a tenor de una reforma penal. Cabe recordar que, inicialmente, el fiscal pedía 32 años y tres meses de prisión para el acusado, cuya defensa la ejercido el letrado Pedro Mena.

El profesor, que ha comparecido en sala, estaba acusado de dos delitos de abuso sexual además de otros cuatro de elaboración de material pornográfico infantil, entre otros, por la supuesta comisión de hechos «con fines exclusivamente libidinosos» a través de los escolares, a quienes daba clase, en algún caso, desde hacía cinco años.

El hombre, que deberá indemnizar a los alumnos con una cantidad total de 31.000 euros en concepto de responsabilidad civil y que ha sido inhabilitado como docente por otros cinco años y medio, daba clases de matemáticas y otras materias como física y química principalmente en su domicilio.

De acuerdo con la acusación del fiscal, el acusado «tenía constante contacto» y «ganada la confianza» de sus alumnos, con quienes «pasaba muchas horas a solas». En ese contexto, y «durante al menos» el verano de 2014, el acusado habría llevado a cabo diferentes hechos punibles con seis alumnos de entre 13 y 17 años.

El fiscal recoge así cómo el acusado comenzó presuntamente a «pedir favores sexuales» a una de sus alumnas de 15 años, a la que se «insinuaba» y le «mandaba fotos» a través de Whatsapp «de menores en ropa interior» para, más adelante y «aprovechando que se sentía coartada la menor por la situación», llegar a abusar de ella. También le tomó fotos y un vídeo «sin su consentimiento».

De igual modo, el relato del Ministerio Público indica que el hombre presionó a otra de sus alumnas para que se desnudara mientras que la grababa a cambio de 50 euros en un «paraje despoblado y solitario» al que la condujo en su coche en vez de llevarla a su domicilio una vez acabadas las clases.

El profesor, que incluso embaucó a los alumnos de menor edad para que le remitieran fotografías, expuso esas mismas imágenes entre los escolares para incitarles a desnudarse y obtener así nuevos archivos, que también conseguía mediante instantáneas que captaba sin que los alumnos se dieran cuenta de ello, de acuerdo con el escrito del fiscal.

El acusado manipuló una fotografía que una de sus alumnas había subido a la red social Instagram para que apareciera el rostro de la menor en un torso femenino desnudo, imagen que trasladó por mensajería instantánea a otros alumnos suyos.

Junto con las medidas decretadas, la fiscalía interesaba además una orden de alejamiento de 200 metros por el periodo que resulte de sumar tres años a la pena privativa de libertad y medidas de libertad vigilada que conlleven la prohibición de residir en el municipio de las víctimas. Junto a esto, solicita que participe en un curso de educación sexual por un periodo de diez años.