En las últimas semanas, el Consistorio ha formulado hasta diez denuncias contra turistas que participaban en este tipo de celebraciones
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| Imagen de archivo. |
EUROPA PRESS / 10·08·2016
El Ayuntamiento de Mojácar ha impuesto desde finales de junio una decena de sanciones administrativas por incumplimiento a la ordenanza municipal de convivencia y ciudadanía que se aprobó en pleno el pasado 26 de mayo y que, entre otras cuestiones, limitaba la celebración de despedidas de soltero para evitar «actitudes» y «vestimentas» que sean «disonantes» con la imagen del municipio, o que puedan resultar «indecorosas», mediante el uso, por ejemplo, de elementos como «muñecas hinchables».
Fuentes municipales han explicado que, hasta la fecha, se han tramitado unas diez sanciones cuyo importe ha oscilado entre los 100 y los 300 euros cada una.
No obstante, desde el Ayuntamiento han asegurado que «se siguen celebrando las despedidas de soltero» en el municipio, pero que ahora «los grupos no forman escándalos tan notables como antes, ni van vestidos de forma indecorosa».
Los grupos, han abundado en este sentido, «siguen disfrutando de la fiesta» con disfraces «divertidos». «Generalmente, en público, en la playa o en las plazas ya no molestan a las familias ni a los turistas. Si hay disfraces o actividades de otra índole, se hace en los locales que hay para estas celebraciones», han remarcado.
Las restricciones a las despedidas de soltero, adoptadas también por otros municipios costeros como Conil o Tarifa (Cádiz) o ciudades como Granada, se ha visto también reforzada con el aumento de Policía Local en la época estival, cuando la localidad incrementa notablemente su población.
La ordenanza, que fue duramente criticada por la oposición al entender que estaba «cargada de ambigüedades» en su aplicación, también regula otras cuestiones como el uso de patinetes en la calzada, jugar con una pelota «a horas intempestivas» o ir en bañador y sin camiseta por la vía pública.
La normativa contempla multas de hasta 1.000 euros de sanción para quienes la incumplan.
Fuentes municipales han explicado que, hasta la fecha, se han tramitado unas diez sanciones cuyo importe ha oscilado entre los 100 y los 300 euros cada una.
No obstante, desde el Ayuntamiento han asegurado que «se siguen celebrando las despedidas de soltero» en el municipio, pero que ahora «los grupos no forman escándalos tan notables como antes, ni van vestidos de forma indecorosa».
Los grupos, han abundado en este sentido, «siguen disfrutando de la fiesta» con disfraces «divertidos». «Generalmente, en público, en la playa o en las plazas ya no molestan a las familias ni a los turistas. Si hay disfraces o actividades de otra índole, se hace en los locales que hay para estas celebraciones», han remarcado.
Las restricciones a las despedidas de soltero, adoptadas también por otros municipios costeros como Conil o Tarifa (Cádiz) o ciudades como Granada, se ha visto también reforzada con el aumento de Policía Local en la época estival, cuando la localidad incrementa notablemente su población.
La ordenanza, que fue duramente criticada por la oposición al entender que estaba «cargada de ambigüedades» en su aplicación, también regula otras cuestiones como el uso de patinetes en la calzada, jugar con una pelota «a horas intempestivas» o ir en bañador y sin camiseta por la vía pública.
La normativa contempla multas de hasta 1.000 euros de sanción para quienes la incumplan.
