Aríbalo de Villaricos

Hallado en una sepultura de Villaricos por el prominente arqueólogo Luis Siret, este objeto formó parte de su colección personal, siendo presentado junto con ella en la Exposición Internacional de Barcelona en 1929


Aríbalo procedente de una sepultura descubierta en Villaricos.

ALMERÍA HOY / 30·08·2016

El Museo de Almería acoge hasta el próximo 1 de noviembre la exposición Un puente de mar azul, con la que trata de dar a conocer la riqueza arqueológica de nuestra provincia, prestando especial atención a la arqueología subacuática.

Con esta ocasión, Almería Hoy, en colaboración con el Museo de Almería, te acerca algunas de las piezas más interesantes de la muestra:


Aríbalo de Villaricos

Hallado por el prominente arqueólogo Luis Siret en una sepultura descubierta en la pedanía cuevana de Villaricos en el siglo XIX, este objeto formó parte de su colección personal, siendo presentado junto con ella en la Exposición Internacional de Barcelona en 1929.

El aríbalo o aryballo es un vaso griego de pequeño tamaño (10,5 por 8,8 centímetros) que se empleaba para conservar aceites perfumados destinados al cuidado corporal. Solo las élites locales podían acceder a este tipo de artículos, considerados de lujo, por lo que no son muy abundantes.

Está decorado con figuras de animales, motivos vegetales y puntos, y al igual que otros vasos griegos del siglo VI a. C. encontrados en Villaricos, probablemente llegara a nuestras costas de la mano de comerciantes fenicios.


Luis Siret

Luis Siret (Flandes, 1860 - Las Herrerías, Almería, 1934) fue un ingeniero de minas que se trasladó a Cuevas de Almanzora con 21 años para trabajar en las minas de Sierra Almagrera, donde investigó yacimientos paleolíticos, neolíticos, calcolíticos, del bronce y un yacimiento de la época de las colonizaciones púnicas y romanas con numerosas tumbas: Villaricos. Como resultado de sus investigaciones, junto con su hermano Enrique, publicó un libro en 1887, titulado Les premiers âges du métal dans le Sud-Est de l'Espagne (disponible para su consulta en el Museo de Almería), en el que dio a conocer a la comunidad científica de todo el mundo sus investigaciones sobre la Prehistoria y la riqueza arqueológica de nuestra provincia. Hoy la obra es de obligada consulta a cualquier arqueólogo que se precie. Gracia a él se pudo estructurar la primera secuencia prehistórica del sureste peninsular (desde el Paleolítico a la Edad de los Metales).

Su archivo en el Museo Arqueológico Nacional ha sido digitalizado recientemente, tras lo que se han puesto en marcha diversas tesis doctorales que nos permitirán profundizar en el conocimiento de su trabajo.